#197 – LAS GUERRAS SON UN CASTIGO POR LOS PECADOS DEL HOMBRE

"Las guerras son un castigo de Dios por el pecado." – Nuestra Señora de Fátima

UNA GRAN CALAMIDAD
"Hijos Míos, los Estados Unidos de América sufrirá una gran calamidad que cobrará muchas vidas. Mi Corazón está destrozado porque Yo sé que muchos no se salvarán.
"He advertido, He dirigido, He apelado a toda la humanidad. Dad vuelta del (mal) camino que os está llevando a una destrucción del mundo. Mientras vuestros líderes a través de vuestro mundo gritan paz y seguridad, ellos preparan la guerra. Ellos presentan caras y frentes falsos en los medios noticiosos mientras preparan la guerra. Oh, hijos Míos, las guerras son un castigo por los pecados del hombre.” – Nuestra Señora, 14 de Julio, 1979

UN GRAN CONFLICTO MUNDIAL
"Las guerras son un castigo por los pecados del hombre. Satán promueve estas guerras empleando la debilidad del hombre. Mientras el hombre idolatra y busca las cosas temporales de este mundo, la tierra, él se alejará de las leyes establecidas por su Dios. Mientras el hombre da vuelta de las leyes de su Dios, él estará involucrado en guerra. Antes de la venida de Mi Hijo y de los ejércitos del Cielo, habrá un gran conflicto mundial. Rezad que vuestros amados no estén involucrados.” – Nuestra Señora, 1 de Noviembre, 1972

SIRIA SOSTIENE LA LLAVE
"Las guerras son un castigo por los pecados del hombre. Siria tiene la llave de la paz en este momento. Sin embargo, Yo coloco delante de vosotros, hijos Míos, un cuadro gráfico para que comprendáis. Será una parábola para algunos, y algunos se voltearán no deseando escuchar lo que el Cielo tiene que decir en estos tiempos desesperados."
Verónica - Nuestra Señora señala hacia arriba con Su dedo, así, hacia Su lado derecho, y muy por arriba de Ella, el cielo se abre--todas las nubes flotan alejándose y el cielo se abre y veo un mapa del Medio Este. Y luego Nuestra Señora señala más allá y ese es otro mapa de China y de Rusia. Nuestra Señora regresa ahora; Ella también estaba viendo hacia arriba.
Nuestra Señora - "Hija Mía e hijos Míos, hay mofadores quienes dirán que no habrá una Tercera Guerra Mundial. Ellos no saben ni pueden concebir del plan del Padre Eterno. Sépase que el Padre tiene un gran Corazón para todos Sus hijos, pero cuando el pecado llega a un pico que sólo conoce el Padre, la cantidad de pecados entre la humanidad, entonces el Padre tomará acción. Él permitirá que sigáis por vuestros caminos réprobos hasta que haya pocas almas para salvar sobre la tierra, porque las otras ya habrán muerto en batalla, y también en las manos de una generación corrupta de los jóvenes.” – Nuestra Señora, 28 de Mayo, 1983

EL HOMBRE SOMETE SU VOLUNTAD A SATANÁS
"Vuestra tierra será purificada con un bautismo de fuego. De esta manera, Nosotros separaremos a las ovejas de las cabras. Las guerras son un castigo por los pecados del hombre. Ellas nunca terminarán mientras el hombre somete su voluntad a satanás.” – Nuestra Señora, 14 de Agosto, 1972

UNA GRAN GUERRA PRONTO SOBRE VOSOTROS
"Sí, hija Mía, el hombre ha sembrado las semillas para su destrucción. Las guerras son un castigo por los pecados de la humanidad.
     "El Padre Eterno ha esperado, en vano, con Su Corazón misericordioso extendido hacia una generación errante. Los corazones se han endurecido; los oídos están cerrados a las súplicas del Cielo. Las ovejas serán separadas de las cabras.
     "Enviamos del Reino eterno del Señor, Dios altísimo en el Cielo, una advertencia para la humanidad. Pronto será enviada una gran guerra sobre vosotros, reclamando muchas vidas a través de vuestra tierra. Os prepararéis y prepararéis las almas de aquellos a quienes amáis.
     "Vuestra nación ha caído a satanás. Muchas naciones a través de vuestro mundo se han entregado a satanás. Los líderes en vuestra nación necesitan muchas oraciones.” – San Miguel, 18 de Junio, 1975

TERCERA GUERRA MUNDIAL
"La Tercera Guerra Mundial comenzará pronto, hija Mía, y reclamará muchas vidas. Muchas naciones desaparecerán de la superficie de vuestra tierra Las guerras son un castigo por los pecados del hombre, hija Mía.” – Nuestra Señora, 5 de Abril, 1975

ROMA SERÁ SITIADA
"Hemos apelado a Nuestros sumos pastores para que reúnan a las ovejas. La ciudad de Roma será sitiada, porque las guerras son un castigo por los pecados del hombre." – Nuestra Señora, 20 de Noviembre, 1975

CONTEMPLAD EL MENSAJE COMPLETO
"Contemplad, hijos Míos, el mensaje completo dado a vosotros a través de Mi Madre. Ella ha sido enviada a vosotros como Mediadora entre Dios y el hombre. Si rechazáis Su consejo, estaréis perdidos. Ella ha prometido reuniros a todos vosotros bajo Su manto de protección y guía. Mi Madre estará con vosotros, y entre vosotros, hasta que Yo llegue después del gran Castigo.
     "Vendré pronto, porque si no lo hago no quedará carne sobre vuestra tierra. Vuestros compatriotas y líderes de vuestro mundo ahora han hecho, en su codicia y avaricia, instrumentos de destrucción - ¡destrucción del cuerpo humano inspirada por satanás! El valor de la vida, la vida humana, se ha perdido. La muerte desenfrenada--asesinatos y abominaciones, ¡todo porque el hombre se ha entregado a sí mismo a una vida de pecado! Las guerras son castigos por los pecados del hombre.
     "¿Qué os puedo decir, hijos Míos? ¿Os cubriré con esperanza y optimismo y os engañaré ante el hecho de la realidad? Os doy esperanza más allá del velo. ¿Qué puedo prometeros sobre vuestra tierra? La humanidad misma sostiene la balanza para su propia destrucción.
     "El Padre Eterno no envía esta destrucción sobre vosotros, sino esto lo proporcionaréis vosotros.” – Jesús, 6 de Diciembre, 1975

EL PECADO ES UNA MANERA DE VIDA
"Hijos Míos, Yo os digo ahora como Madre vuestra que Mis lágrimas caen sobre vosotros, porque no sabéis lo que estáis haciendo. Estáis trayendo sobre vosotros un gran castigo.
"¿Sois tan ciegos que no reconocéis la aceleración del pecado entre vosotros? Los asesinatos abundan, los robos, toda clase de carnicería, destrucción de almas jóvenes, aborto, homosexualidad, condenados desde el principio del tiempo por el Padre Eterno. Además, el pecado se ha convertido en una manera de vida. El pecado es tolerado ahora, aún dentro de los más altos jueces de vuestro país y de vuestros países a través del mundo. Como habéis sembrado, así cosecharéis. El pecado es muerte, no sólo del espíritu, sino también del cuerpo. Las guerras son un castigo por los pecados del hombre, su codicia, su avaricia.” – Nuestra Señora, 14 de Agosto, 1981

MUCHAS VIDAS SERÁN PERDIDAS
"Las guerras son un castigo por los pecados del hombre. Hijos Míos, Mi Corazón está destrozado. Estoy con vosotros, observando vuestro camino, el trayecto sobre el cual estáis viajando. Muchas vidas se perderán en la gran Guerra.
"Las fuerzas del mal se reúnen alrededor de la ciudad de Jerusalén. Yo caminé allí, hijos Míos. Mi hogar será destruido. Habrá mucha sangre derramada sobre Mi hogar.” – Nuestra Señora, 24 de Junio, 1976

GRAN DISCORDIA, LUCHA Y PRUEBA
"Yo repito: las guerras son un castigo por los pecados del hombre. Y los frutos del pecado son la muerte. Yo miro sobre vosotros, hombres de la tierra, y encuentro que muchos de vosotros ya estáis muertos. Sois almas muertas en cuerpos vivos. Tenéis sólo un corto tiempo para reavivar vuestros espíritus con la Luz. No podéis regatear por vuestras almas, porque desecharéis la Luz. No podéis vender vuestras almas a satanás por ganancias en vuestros pocos años de peregrinación sobre vuestra tierra. No venderéis vuestra alma para llegar a la cima.
"Pastores en Mi Casa, Yo os veo y os encuentro faltos. No tengo que señalaros, todos y cada uno, y dividiros ahora por vuestros méritos. Ya vosotros estáis dividiéndoos en dos campos. Habrá gran discordia y lucha y prueba dentro de Mi Casa, y habrá discordia, lucha y prueba entre la raza humana.” – Jesús, 24 de Diciembre, 1976

PELIGRO ADELANTE DE INVASIÓN
"He venido esta noche, hija Mía e hijos Míos, específicamente para advertiros del gran peligro que se acerca a los Estados Unidos de América y a Canadá. Ahora los enemigos están reunidos desde adentro. También digo, hijos Míos, que debo también advertir a aquellos quienes viven cerca de las aguas de los grandes mares. Hay peligro adelante de invasión. Oh, hijos Míos, rezad--rezad una vigilia constante de oración. Las guerras son un castigo por los pecados del hombre." – Nuestra Señora, 18 de Junio, 1983

“SI NO ESCUCHÁIS…”
"Mi Hijo está muy acongojado por la manera en que Su Sacrificio es conducido dentro de las iglesias del mundo. ¡Pastores! Pastores de Nuestro rebaño, ¿no tenéis el valor de pelear por la Luz? ¿Le teméis a la humanidad? ¡Ningún hombre os salvará de vuestra recompensa eterna si recibís la recompensa de vuestras abominaciones! Seréis arrojados al abismo, contados entre los menos. Se os ha dado una vocación divina. ¡Escandalizáis a aquellos quienes han sido encomendados a vosotros! ¡Despertad de vuestra ceguera! Obispos, la sal - ¿qué le habéis hecho a vuestra vocación? ¡Habéis traído el escándalo, destrucción de almas!
"Os ruego, como Madre vuestra, que escuchéis Mis advertencias. Mi súplica urgente es una gran preocupación para vuestro mundo ahora. Porque si no Me escucháis ahora, caeréis rápidamente en una gran guerra mundial. Las guerras son un castigo por los pecados del hombre.” – Nuestra Señora, 18 de Marzo, 1975

AMÉRICA SERÁ CASTIGADA
"Ya se han reunido las fuerzas del mal; y vuestro país, los Estados Unidos, que ha proseguido ahora hacia la oscuridad espiritual, sufrirá una gran crisis. El tiempo de ser optimista ya ha pasado. Vuestro país, los Estados Unidos de América, será castigado. Mi Corazón está desolado por el conocimiento del gran número de vidas pérdidas que habrá con este castigo menor. Las guerras son un castigo por los pecados del hombre.” – Nuestra Señora, 20 de Noviembre, 1979

“HACEDLO SABER”
"Hacedlo saber, hija Mía e hijos Míos, a toda la humanidad que todas las guerras son un castigo por los pecados del hombre.
"Todos y cada hombre, mujer y niño sobre la tierra ahora tienen la hora, el día y el mes contados para dejar la tierra. Preparad vuestro pasar, hijos Míos, porque el tiempo se está acortando para muchos. Tu, hija Mía, tendrás que defender la Fe, no preocupándote por la opinión de la humanidad, ni por las objeciones o consolación de hombre o amigo alguno sobre la tierra. La Misión del Cielo siempre será primero, y la Fe como ha sido dada a través de los años incontables de tiempo terrenal no deberá ser diluida ni cambiada para llenar las necesidades de vuestra tal llamada era moderna de avances científicos.” – Nuestra Señora, 7 de Septiembre, 1979

EL APOCALIPSIS
"Las guerras son un castigo por los pecados del hombre. Una gran Guerra removerá a muchos del mundo. ¡Ay, ay, ay, hijos Míos, a los habitantes de la tierra!
"Leeréis las advertencias y el mensaje en el Libro de la Vida, conocido como los últimos días del Apocalipsis. Leedlo, estudiadlo bien, y aprended de él. El curso de la humanidad viaja rápidamente hacia la conclusión del libro del Apocalipsis.” – Nuestra Señora, 20 de Noviembre, 1974

NATURALEZA HUMANA
"Muchas advertencias menores, hija Mía, han sido dadas a la humanidad, pero han pasado desapercibidas. En vuestra naturaleza humana, muchos no escucharéis hasta que sea demasiado tarde. ¿Por qué debéis recibir la espada antes de escuchar? ¡Las guerras son castigos por los pecados del hombre!” – Nuestra Señora, 12 de Junio, 1976

AL BORDE DE UNA GRAN DESTRUCCIÓN
"Yo pido a aquellos que ahora--pueden escuchar Mi voz, Yo os imploro, como Madre vuestra, para que Me escuchéis y sigáis esta instrucción, o recibiréis un gran castigo. Ahora debéis poneros de rodillas y hacer expiación, sacrificio y haced penitencia por vuestro país y por vuestra nación, y por los países del mundo. Ahora estáis al borde de una gran destrucción. Es por eso, hija Mía, que te llevé al punto crítico, al filo del abismo, y te lo enseñé.
"Comprendéis, hija Mía e hijos Míos, que las guerras son un castigo por los pecados del hombre.” – Nuestra Señora, 13 de Junio, 1981

PICO DE INIQUIDAD
"¿Cuánto tiempo, preguntas, hija Mía, será? Esta decisión está solamente en los corazones de la humanidad. Cuando las abominaciones han alcanzado un pico de gran iniquidad, debes saber entonces que el fin está cerca.
"Muerte, hambre, destrucción, semillas del mal floreciendo hasta el punto que temeréis que una locura en masa se ha puesto sobre vuestro mundo. El pecado, hijos Míos, es locura. ¡Las guerras son un castigo por vuestros pecados! ¡Despertad! ¡Sacad la oscuridad de vuestros corazones! Haced expiación por vosotros mismos, ¡porque ningún hombre puede decir que no ha ofendido a su Dios!” – Jesús, 28 de Diciembre, 1974

DOLORES ABRUMADORES DE LA GUERRA
"Hija Mía, ninguna de Mis palabras ni de un ser humano pueden explicarte los horrores y los dolores abrumadores de la guerra. Las guerras son un castigo por los pecados del hombre. Siempre habrá guerras entre la humanidad a medida que continúe ofendiendo a su Dios.” – Nuestra Señora, 18 de Marzo, 1977

GRAN CATÁSTROFE SOBRE EE.UU.
"Rezad por vuestros dirigentes políticos. Rezad, hijos Míos, para que el Padre Eterno sea más misericordioso y os permita más tiempo antes que una gran catástrofe caiga sobre vuestra nación, los Estados Unidos (de América).
"¡ Recordad hijos Míos, siempre, que las guerras son castigo por los pecados del hombre!” – Nuestra Señora, 14 de Agosto, 1979

LA MORAL
"Hija Mía e hijos Míos, comprendéis que es un hecho conocido que cuando la moral de una nación cae, esa nación será destruida de una u otra manera. Las guerras siempre son un castigo por los pecados del hombre." - Nuestra Señora, 18 de Junio, 1992

III GUERRA MUNDIAL
Verónica - . . . Nuestra Señora ahora ve hacia abajo, tristemente. Y veo que Ella señala hacia lo que parece un mapa. ¡Oh!
Ahora a medida que observo--es un mapa de--oh, puedo ver Jerusalén y Egipto, Arabia, Marruecos francés, África. ¡Oh! Parece haber ahora una gran oscuridad que se fija sobre esos países. ¡Oh!
Y Nuestra Señora dice:
Nuestra Señora - "El inicio de la Tercera Guerra Mundial, hija Mía." – 20 de Marzo, 1975

EL MUNDO ENVUELTO
"Las guerras son castigos por los pecados, y las guerras acelerarán, hasta que todo el mundo esté envuelto en un incendio. Solamente Mi Hijo puede pedirle al Padre una suspensión temporal de lo que os llegará.” – Nuestra Señora, 7 de Septiembre, 1985

NINGUNA PAZ A MENOS QUE...
"Los Estados Unidos de América se acerca rápidamente al comienzo de la Tercera Guerra Mundial. Hijos Míos, vuestros periódicos y medios de comunicación no os dan cuenta de estas misiones secretas. Hay hombres que van del Departamento de Estado, de aquí para allá, para adelante y para atrás; (ellos) buscan la paz, paz, donde no hay paz; y paz donde no habrá paz, a menos que sigan los consejos del Padre Eterno y los Mensajes dados por el Cielo en los años pasados, no solamente en estos terrenos, hijos Míos, en Bayside y en Flushing Meadows, sino también a varios videntes, jóvenes y viejos, alrededor del mundo. El mundo grita paz, paz, y no habrá paz, a menos que el mundo reconozca Mis advertencias de precaución desde hace muchos años terrenales, y actúen sobre ellos.
"Os he prometido paz, hijos Míos, si vais adelante con vuestro Rosario en una mano y el Escapulario Marrón alrededor de vuestro cuello. Cuántos habéis desechado vuestra armadura por temor, o porque teméis las burlas de aquellos quienes ya han endurecido sus corazones a la verdad." - Nuestra Señora, 1 de Julio, 1985

CONSAGRAR A RUSIA
"Para la paz, hija Mía ... mucho se pide por la paz sobre la tierra. Debo deciros esto: Que no habrá paz, hijos Míos, hasta que lo que ha sucedido en el pasado con Mi visita a Fátima, sea consumado. Esto tiene que hacerse ahora, hijos Míos; Yo os lo repito de nuevo--como lo He repetido, mientras He ido y venido por la tierra para tratar de iluminar a Mis hijos el camino hacia la verdadera paz--debéis ahora deshacer, abrogar la unión de Roma con Rusia. Porque Rusia tiene que ser consagrada a Mi Inmaculado Corazón para que haya una verdadera paz." - Nuestra Señora, 6 de Junio, 1987

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