#199 – ENOJO

“Habéis oído que se dijo a vuestros mayores: No matarás; y que quien matare será condenado a muerte en juicio. Yo os digo más: quien quiere que tome ojeriza con su hermano, merecerá que el juez le condene. Y el que le llamare Raca, merecerá que le condene el concilio. Mas quien le llamare fatuo, será reo del fuego del infierno.” – San Mateo 5:21-23

NO DEBÉIS ENOJAROS
"Vosotros, hijos Míos, no debéis desarrollar el enojo, sino rezad por un alma caída, porque si no fuese por la gracia de Dios, allí iréis. Sí, si no fuese por la gracia del Padre Eterno todos vosotros caeríais a la consecuencia de vuestro pecado. Ningún hombre está libre de la tentación. Ningún hombre está libre de los ataques de satanás. Vuestra vida sobre la tierra, hijos Míos, será una constante batalla en contra de los enemigos de Dios." - Nuestra Señora, 10 de Mayo, 1972

NO HABLÉIS CUANDO ESTÉIS ENOJADO
"Debo advertiros ahora en los días venideros que no debéis ser guiados o malguiados por los eventos que el maligno traerá sobre vosotros en su intento para destruir la Casa de Mi Hijo (Iglesia). Debéis ayudar a vuestros sacerdotes. No es constructivo hablar con enojo en contra de la Casa de Mi Hijo. Si tenéis algo que decir que sentís está siendo mal hecho, id con las personas involucradas, vuestros sacerdotes, vuestros obispos. No divulguéis palabras entre los no creyentes, aquellos quienes esperan tomar cualquier cosa que puede emplearse para reflejar y destruir la Casa de Mi Hijo. Debéis daros cuenta ahora que el problema dentro de la Casa de Mi Hijo ha sido causado por el hombre de perdición—el anticristo, quien ha estado suelto entre vosotros en esta batalla final. Si haríais a un lado vuestros placeres mundanos, el consentimiento de vuestros cuerpos, vuestros ojos ya no estarían ciegos. Podríais ver la existencia del maligno en vuestra nación—¡pero no! Habéis escogido desecharnos a Nosotros a favor de vuestros placeres temporales. Aquellos quienes Nos han amado lo suficiente para que les importe—no hay nada que temer, porque Nosotros extenderemos Nuestra misericordia muy lejos y muy ampliamente." - Nuestra Señora, 3 de Abril, 1971

DEBILIDADES HUMANAS
"Estoy muy consciente, hija Mía, de tus angustias al no poder estar sobre Mis Terrenos Sagrados, el Santuario. Sin embargo, recuerda que te He dicho que regresarás. Persevera; el tiempo se acerca. [esto alude al cambio en el lugar de las apariciones debido a las fuertes y a veces violentas objeciones de alguno de los residentes locales]
"Sí, hay una fuente sobre los Terrenos de agua para curaciones. Cuando el tiempo sea propicio, el Padre Eterno hará que las aguas broten. El enemigo vigila; los hijos engañados de Dios, hija Mía—debes rezar por ellos. Si ellos reciben la Luz, por tus oraciones y las oraciones de otros, ellos, también, comprenderán. Ellos no han recibido esta Luz porque muy pocos han rezado por ellos. Ellos se han entregado a la flaqueza humana de enojo y juicio. Reza por ellos, y verás un milagro." - Nuestra Señora, 10 de Febrero, 1976

NO HAY LUGAR EN VUESTRO CORAZÓN PARA EL ENOJO
"Hijos Míos, rezad una vigilia constante de oración, Yo os imploro, ya que no sabéis lo que pronto ha de venir sobre vosotros. Rezad por vuestros obispos, hija Mía. No hay lugar para enojo en vuestro corazón, sino siempre debe haber caridad y oración." - Nuestra Señora, 7 de Diciembre, 1978

PROFANIDAD Y ENOJO
"Hijos Míos, advertid a otros a través del mundo que no deben emplear el nombre de Mi Hijo en blasfemias ni cólera. El nombre de Mi hijo está siendo abusado de tal forma ahora que el Padre Eterno tiene Su Mano opresora cerca de la Bola que está al pie de Su Trono." - Nuestra Señora, 1 de Julio, 1985

PRINCIPE NEGRO DEL INFIERNO
"Sed guiados por el Espíritu Santo que os llega a través del Padre Eterno. En la oscuridad Él guiará a los que Lo mantienen en sus corazones. Nuestro Padre es el Señor, el Dios Altísimo en el Cielo. El hombre mancillado conoce su padre como el príncipe negro del infierno, y ese padre del oscuro abismo esparce destrucción, miedo, violencia, odio, asesinato de bebés inocentes. Escuchadme ahora, y recordad lo que digo, ¡habéis traído la espada sobre vosotros por vuestras propias acciones! Porque así como el Padre os dio libre albedrío para escoger vuestro camino—si no buscasteis la gracia necesaria para manteneros sobre el camino recto, es porque hubo muy pocas oraciones, demasiados pocos a quienes les importó salvarse, ¡o salvaros!" - Nuestra Señora, 3 de Abril, 1971

ODIO Y DECEPCION
"Ahora Rusia tiene la ventaja en este momento en cuánto a la paz mundial o a la destrucción mundial. Debéis comprender que el corazón del ateo está cerrado a la misericordia y a la bondad; una alma oscurecida se ha cerrado a la Luz. Y ellos buscan nada más que la destrucción de cualquier hombre, mujer o niño que se ponga en su camino, para tomar y ganar, a través del odio y la decepción entre las familias, y también, la ruina de las vidas de los hijos de todas las familias." - Nuestra Señora, 5 de Octubre, 1985

ODIO Y DESTRUCCIÓN
"Mi Madre os aconseja bien cuando Ella os advierte de comprometeros con los enemigos de vuestro Dios, los peligros que traes a vuestra nación. Hijos Míos, las palabras de los ateos no tienen peso; no hay confianza en un hombre sin dios, y no podéis asociaros con ellos, porque amaréis a uno y odiaréis al otro. ¿Es que no hay ahora un espíritu de odio ahora en contra de los personajes del Cielo?
"Hijos Míos, despertad de vuestro sopor. Los que han de ser salvados, ¿serán contados entre los pocos? Hijos Míos, esa será vuestra decisión. Os repito: mientras el mundo clama paz, paz, amor y hermandad, ¡ellos ahora siembran odio y destrucción! ¡Las palabras que salen de su boca no vienen del corazón! ¡Palabras de destrucción! El Padre Eterno, Él mira dentro de vuestros corazones. Ningún hombre se establecerá a sí mismo a juzgar a otro, pero no podéis esconder vuestros corazones del Padre Eterno." - Jesús, 10 de Febrero, 1977

LOS NIÑOS SIENDO CONDICIONADO A ODIAR
"¡Mi Corazón se desangra por lo que veo! Esos pobres niños, sus almas y cuerpos destruidos por el enemigo que habéis permitido entrar en vuestra nación. Estos niños sufren en las manos de sus mayores. Veneno ha sido colocado en sus cuerpos para destruirlos. La destrucción de los cuerpos es como nada porque entra la destrucción en el alma, entonces, hijos Míos, las lágrimas caerán de la angustia de conocer la pérdida para toda la eternidad. Ya no queda amor en los corazones de vuestros hijos. ¡Ellos están siendo condicionados a odiar! ¡A destruir! Todos los padres de familia deben ver ahora los días que están ante vosotros. Veréis cómo vuestros hijos se voltearán de vosotros. Sí, vosotros recibiréis y recogeréis los productos de vuestra laxitud. ¡Vuestra ciudad es como una letrina! Todos los males vienen aquí como a un núcleo, y se expanden. Cuándo la mano venga sobre vosotros, ¡seréis arrasados por vuestro libertinaje, vuestra avaricia, vuestra inmoralidad! Los niños deben ser salvados porque ellos son las víctimas inocentes de los mayores. Padres de familia quienes se han vueltos laxos a medida que buscan los placeres del mundo antes del bienestar espiritual de sus hijos – ¡las almas de sus hijos!" - Nuestra Señora, 7 de Septiembre 7, 1971

"NO SIGÁIS A LOS MOFADORES"
"No sigáis a los mofadores quienes continúan diciendo: `Su promesa no se ha cumplido, ni se cumplirá, el que vendrá una Segunda vez'. Os aseguro que vendré a vosotros como un ladrón en la noche. Pocos estaréis preparados a no ser que escuchéis el consejo de Mi Madre y mantengáis abiertos vuestros corazones a la verdad. Entre más buscáis riquezas en esta vida, menos las tendréis en el cielo, porque no coinciden, hija Mía e hijos Míos. No podéis tener un dios simbolizado por el dinero ante vosotros, porque amaréis a uno y detestaréis al otro. ¿Y a quién detestaréis, hijos Míos, sino a Mí?" - Jesús, 7 de Septiembre, 7, 1985

NIÑOS ENSEÑADOS A PECAR, A ODIAR
"Hijos Míos, removed de vuestras casas todas las escrituras seculares; leed únicamente vuestra Biblia, el Libro del Amor y de la Vida. Vuestros hijos están siendo expuestos a control mental. Vuestros hijos están siendo enseñados a pecar, a odiar, a asesinar... los mayores y ancianos. Padre contra hijo, madre contra hija, conflicto dentro del hogar, mientras satán busca apropiarse de las almas de los jóvenes.
"Los mandamientos del Padre Eterno fueron escritos por completo; la construcción de la Iglesia de Mi Hijo fue dada enteramente. Todo será encontrado en la Biblia escrito por los padres fundadores de la Iglesia, vuestro Libro de la Vida y del Amor. Pastores en la Iglesia de Mi Hijo, ¿qué buscáis reformar? Tuvisteis la verdad, tuvisteis la Luz, pero con oídos inquietos estáis escuchando a los demonios." - Nuestra Señora, 23 de Mayo, 1979

DEMONIOS LLENOS DE ODIO Y MALICIA
"Hijos Míos, no hay nada por ganar permitiendo que los demonios gobiernen vuestras vidas, ya que los demonios están llenos de odio y malicia, destrucción y muerte. Ningún bien descansa dentro de lo sobrenatural de los demonios. Es el mundo de satanás. Y habéis permitido que vuestro mundo sea tomado porsatanás, el padre de todos los mentirosos, el maestro del engaño, y un asesino desde el comienzo." - Jesús, 21 de Noviembre, 1977

"SIN MI HIJO ESTÁIS PERDIDOS"
"Sin Mi Hijo estáis perdidos. Una nación sin dios caerá. Una nación que sido corroída y podrida por el pecado, caerá. Una nación que ha retrocedido y que ha regresado a un estado de vida animal, bordeando en todos los pecados de la carne e impureza, entregada a toda forma de buscar cosas mundanas: poder, lujuria, envidia, odio, asesinatos, abortos, idolatría de ídolos falsos; amando al dinero, al poder y careciendo del instinto para sobrevivir cuando la sobrevivencia sólo puede obtenerse implorando por ellos al Corazón misericordioso del Padre Eterno." - Nuestra Señora, 13 de Junio, 1981

SEMILLAS OSCURAS DE ODIO Y ENVIDIA
"Hijos Míos, comprendednos: Nosotros no llegamos a vosotros con mensajes para alteraros ni para que Nos temáis; eso no es necesario. Lo único que tenéis que hacer es pensar, y emplear vuestros corazones, no sólo vuestras cabezas; digo no sólo vuestras cabezas porque los científicos y aquellos encargados de las almas de vuestros hijos están sembrando en estas almas semillas negras de odio y de envidia, y la necesidad del materialismo. Oh, hijos Míos, Yo podría repetir una y otra vez los pecados que hacen del mundo uno de destrucción para aquellos quienes están tratando de mantenerse por el camino estrecho hacia el Cielo, mientras todos los obstáculos son puestos en su camino.” - Nuestra Señora, 5 de Octubre, 1985

COSECHAN ODIO Y ASESINATO
"Hay muchos ahora—agentes de satanás. Ellos estaban, hija Mía, en las sinagogas de Mi tiempo y ellos, ahora, están en las sinagogas de tu tiempo. Sin embargo, ellos no son verdaderos hombres de Dios; por lo tanto, ¡Yo las llamaré las sinagogas de satanás! ¡Ellos no honran a su Dios! ¡Ellos se han establecido a sí mismos para honrar al hombre! ¡Dios no tiene ningún lugar en sus vidas! ¡El hombre no será una criatura para adorar! ¡Separaos de estas sociedades secretas! No seáis engañados por sus palabras endulzadas de humanismo y modernismo, hermandad y amor—amor, amor. Tantas palabras de amor que escuchamos, y ¡qué cosechan sino odio y asesinato! ¡Por sus frutos serán conocidos!" - Nuestra Señora, 7 de Septiembre, 1974

MANSEDUMBRE DEL ALMA
"El Espíritu de verdad, hijos Míos, ha sido enviado a vosotros un sin fin de veces en el presente y en el pasado. Muchos Lo han rechazado, eligiendo colocarse a sí mismos sobre el camino del error y la condenación. ¡Orgullo, orgullo intelectual en la Casa de Dios es una barrera más formidable que el total desenfreno! ¡Esta barrera destruye! ¡Libraos de este orgullo y arrogancia! ¡Regresad a vuestro estado de pobreza de cuerpo y mansedumbre del alma! ¡A menos que os hagáis como los pequeños niños, no entraréis al Reino." - Nuestra Señora, 1 de Julio, 1974

NUNCA SERÁ ACEPTADA
"Hija Mía—Nosotros debemos probarte todo el tiempo para ayudarte por si sales de la gracia por enojos. Cualquier cosa dicha con enojo nunca será aceptada por el Cielo." - Jesús, 18 de Junio, 1988

ODIO Y DESTRUCCIÓN
"Mi Madre os aconseja bien cuando Ella os advierte de hacer compromisos con los enemigos de vuestro Dios, los peligros que estáis llevando a vuestro país. Hijos Míos, las palabras de los ateos no tienen peso; no hay confianza en un hombre impío, y no podéis asociaros con ellos, porque amaréis a uno y detestaréis al otro. ¿No hay ahora un espíritu de odio hacia todos los personajes del Cielo?
"Hijos Míos, despertad de vuestro sueño. Los que serán contados, salvados, serán entre los pocos. Hijos Míos, ésa será vuestra decisión. Os repito: ¡mientras el mundo implora paz, paz, amor y hermandad, ellos siembran odio y destrucción! ¡Las palabras que salen de la boca no vienen del corazón! ¡Palabras de destrucción! El Padre Eterno, El os mira dentro de vuestro corazón. Ningún hombre se establecerá a juzgar a otro, pero no podéis esconder vuestro corazón del Padre Eterno.” - Jesús, 10 de Febrero, 1977

LOS NIÑOS CONDICIONADOS A ODIAR
"La destrucción de los cuerpos es como nada porque cuando llega esta destrucción al alma—entonces, hijos Míos, las lágrimas caerán de la angustia de conocer la pérdida para toda la eternidad.
     "Ya no queda amor en los corazones de vuestros hijos. Ellos están siendo condicionados a odiar, a destruir. Todos los padres de familia tienen ahora que ver los días que están por delante de vosotros.   Veréis cómo vuestros hijos se voltearán contra vosotros. Sí, recibiréis y cosecharéis los productos de vuestra laxitud.
     "Vuestra ciudad es un pozo de inmundicia. Todos los males vienen aquí como a un núcleo y se dispersan. Cuando la mano caiga sobre vosotros, seréis nivelados por vuestro libertinaje, vuestra avaricia, vuestra inmoralidad.
     "Los niños tienen que ser salvados, porque ellos son las víctimas inocentes de sus mayores—los padres de familia quienes se han vuelto laxos a medida que buscan los placeres del mundo antes que el bienestar espiritual de sus hijos, las almas de sus hijos.
     "Huiréis de todos los falsos pastores. No seréis llevados a falsa obediencia, porque de esta manera seréis llevados como ovejas al matadero.” - Nuestra Señora, 7 de Septiembre, 1971

LOS NIÑOS SIENDO CONDICIONADO A ODIAR
"¡Mi Corazón se desangra por lo que veo! Esos pobres niños, sus almas y cuerpos destruidos por el enemigo que habéis permitido entrar en vuestra nación. Estos niños sufren en las manos de sus mayores. Veneno ha sido colocado en sus cuerpos para destruirlos. La destrucción de los cuerpos es como nada porque entra la destrucción en el alma, entonces, hijos Míos, las lágrimas caerán de la angustia de conocer la pérdida para toda la eternidad. Ya no queda amor en los corazones de vuestros hijos. ¡Ellos están siendo condicionados a odiar! ¡A destruir! Todos los padres de familia deben ver ahora los días que están ante vosotros. Veréis cómo vuestros hijos se voltearán de vosotros. Sí, vosotros recibiréis y recogeréis los productos de vuestra laxitud. ¡Vuestra ciudad es como una letrina! Todos los males vienen aquí como a un núcleo, y se expanden. Cuándo la mano venga sobre vosotros, ¡seréis arrasados por vuestro libertinaje, vuestra avaricia, vuestra inmoralidad! Los niños deben ser salvados porque ellos son las víctimas inocentes de los mayores. Padres de familia quienes se han vueltos laxos a medida que buscan los placeres del mundo antes del bienestar espiritual de sus hijos—¡las almas de sus hijos!" - Nuestra Señora, 7 de Septiembre 7, 1971

LA IRA JUSTIFICADA Y LA VIRTUD DE FORTALEZA

(Deseamos citar del libro Las Cuatro Virtudes Cardinales por Josef Pieper, para poder aclarar la enseñanza que tiene la Iglesia sobre el papel de la ira justificada, la cual es necesaria para oponerse al mal. Nuestro Señor mismo expresó una ira justificada en varias ocasiones (cf. Marcos 3:4-5). Las citas tomadas del mensaje anterior de Nuestra Señora se refieren a la ira pecaminosa):

“[Sto.] Tomás suscitó la objeción: Si la fortaleza es una perfección, entonces ¿cómo puede ser su acto esencial el aguantar y resistir? Aguantar es pura pasividad y el hacer algo en forma activa es más perfecto que un sufrimiento pasivo. Y él responde: Aguantar engloba una fuerte actividad del alma, es decir, un agarre ávido al bien y una adhesión al bien; y únicamente a partir de esta actividad intrépida puede nutrirse la fuerza para tolerar el sufrimiento físico y espiritual de una lesión o una muerte. No se me puede negar que una Cristiandad tímida, abrumada y asustada por el criterio no-cristiano del ideal de una fortaleza que es activísticamente heroica, ha sofocado este hecho en el conocimiento general y la ha mal interpretado en el sentido de un pasivismo vago y resentido...

“El hombre valiente no sólo sabe como soportar con ecuanimidad el mal inevitable, tampoco vacilará en ‘abalanzarse’ sobre el mal e impedir su paso, si esto lo puede hacer razonablemente. Esta actitud requiere de celeridad para atacar, valentía, auto-confianza y esperanza en el éxito; ‘la confianza, que es parte de la fortaleza, significa la esperanza que el hombre pone en sí mismo, naturalmente subordinado a Dios (Summa II, II, 128, 1 ad 2)…

“Sin embargo, el hecho que Tomás le asigna (únicamente) a la ira una relación positiva a la virtud de la fortaleza se ha vuelto ampliamente ininteligible y no aceptable para la Cristiandad de hoy y para su ética no-Cristiana. Esta falta de compresión puede explicarse en parte por la exclusión, de la ética Cristiana, del componente de la pasión (con su aspecto inevitablemente físico) como algo alienígeno e incongruente – una exclusión debida a cierta clase de estoicismo intelectual – y en parte por el hecho que la actividad explosiva que se revela en ira es naturalmente repugnante para el buen comportamiento que es regulado por las normas ‘burguesas’. El hombre valiente usa la ira para sus propios actos, sobre todo en ataques, ‘ya que es característico de la ira el abalanzarse sobre el mal. Por lo tanto, la fortaleza y la ira trabajan directamente una sobre la otra’ (Summa II, II, 123, 10 ad 3)

“Tomás de Aquino, en su comentario sobre el Evangelio de San Juan, ha indicado la aparente contradicción entre esta escena (así como entre la de los Hechos de los Apóstoles, al cual se refiere abajo) y el mandato del Sermón de la Montaña: Yo, empero, os digo, que no hagáis resistencia al agravio; antes bien, si alguno te hiriere en la mejilla derecha, vuélvele también la otra’ (Mateo 5:39). Una exégesis pasiva es muy incapaz de resolver esta ‘contradicción’. Tomás explica (en acuerdo con Agustín): ‘Se deben comprender las Santas Escrituras en vista de lo que Cristo y los santos realmente han practicado. Cristo no ofreció Su otra mejía; tampoco lo hizo Pablo. Entonces, para interpretar el mandato del Sermón de la Montaña en forma literal es comprenderlo erróneamente. En vez, este mandato significa la aptitud que tiene el alma de soportar, si fuese necesario, tales cosas y peores, sin amargura en contra del atacante. Nuestro Señor mostró esta celeridad cuando entregó Su Cuerpo para ser crucificado. Esa respuesta del Señor fue útil, por lo tanto, para nuestra instrucción.’ (En Juan 18, lect. 4, 2)

“Similarmente, el Apóstol Pablo, a pesar que toda su vida estuvo orientada al martirio, no sufrió el mismo en silencia cuando, con la orden del sumo sacerdote, los espectadores lo ‘golpearon en la boca’ por su discurso atrevido ante el Sanedrín; en vez, le respondió al sumo sacerdote: ‘¿Herirte ha Dios a ti, pared blanqueada. Tú estás sentado para juzgarme según la Ley y contra la Ley mandas herirme? ’ (Hechos 23:3)”

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