Nuestra
Señora de las Rosas, María Auxilio de Madres
Junio
8, 1972 - Víspera del Sagrado Corazón de Jesús
Nuestra
Señora - “Oh,
hijos Míos, ¡cómo caen Mis lágrimas sobre vosotros! ¡Cuántos han sido
llevados por el camino equivocado! ¿Cómo
os recuperaré en el tiempo que queda?
“Mi voz se vuelve cada vez más débil.
Mis pasos se hacen más lentos. He
ido a través de todo el mundo trayéndoos vuestro plan para la salvación.
¿Cuántos de vosotros habéis escuchado Mis súplicas?
Nosotros vemos en vuestro país que se permiten las prácticas más
degradadas para la gloria de Nuestro adversario, Satanás.
“Padres, observad a vuestros hijos.
Guardadlos bien. El enemigo
siempre está a vuestra puerta. Vuestro
país se ha volcado a prácticas paganas. Mi Hijo desearía pasaros en este
momento el papel del castigo.
“Aquellos que permanecéis con Nosotros en la luz no tendréis por qué
temer. Todo estará bien con
aquellos de espíritu verdadero.
“Os he prometido cubrir con Mi Manto a todos que venís a Mí.
Os he dado vuestra armadura. Usaréis
vuestra armadura en todo momento, porque puedo deciros ahora que el tiempo vendrá
cuando os iréis con solo lo que lleváis puesto sobre vuestros cuerpos.
“El hombre ha dejado por un lado el camino que va al Cielo.
El ha forjado su camino hacia el sendero oscuro en vez del sendero recto.
La responsabilidad de la caída de las almas será equilibrada
fuertemente sobre aquellos que son responsables de la destrucción de almas jóvenes.
Padres de familia, ¿por qué vais por el camino de Satanás?
¿Ha sufrido Mi Hijo en vano?
“Hijos Míos, ahora voy por el mundo reuniendo a las ovejas
descarriadas. Os he pedido que
encendáis vuestras candelas Conmigo.. El
corazón de Mi Madre está roto. Veo que muchas almas son arruinadas por
Lucifer, que caen tan rápidamente al abismo como los copos de nieve.
“Si el Padre me permitiera abrir vuestros ojos a lo que os espera en el
futuro, pasaríais todo vuestro tiempo de rodillas.
“Hijos Míos, no aceptéis el camino fácil que lleva a la condenación.
Os he dado la verdad. Mi
Hijo os ha dado la gracia. Reconoced
la batalla que en este momento se libra en el universo.
Es, hijos Míos, el Armagedón.
“No sois dirigidos a la luz. El ejemplo que os dan vuestros maestros no
es de la luz. Llora, no por Mí,
hija Mía, sino por los hijos de la tierra.
“Tu y tu país fueron colocados bajo Mi protección y no los abandonaré.
Mi Hijo no te abandonará. Pero tu
debes tomar la decisión. No
podemos forzarte a que vengas a Nosotros, porque el Padre te ha dado un libre
albedrío.
“Madres, ¿por qué sois permisivas con vuestros hijos?
¿No reconocéis el plan de Satanás?
¿Deseáis que ojos lujuriosos se posen sobre la inocencia de vuestros
hijos? ¡No guiéis a
vuestros hijos al peligro!
“¡He observado con el Corazón roto al padre o madre que guía a su
hija a los carniceros! ¡Cómo os
atrevéis a matar una creación de vuestro Dios!
¿Creéis que podréis continuar así, sin ser notados ni castigados?
¡No! En vuestro país se cometen los actos de violencia, impureza del
corazón, asesinatos sin conciencia, ofensas de toda naturaleza
contra Vuestro Dios. Vuestra
ciudad es una letrina de pecado. Muchas
ciudades en vuestro país se han vuelto oscuras con el pecado.
¿Continuaréis buscando el camino en la oscuridad?
“Comprended, hijos Míos, que estáis en una ardua batalla.
El abismo está abierto, y cuando estáis en Nuestra luz las fuerzas del
mal se duplican en vuestra contra. Por
lo tanto, estad atentos
“Los milagros escritos se os dan para fortificar vuestras fuerzas en
espíritu y creencias. Hijos Míos,
no le deis crédito al adversario, Satanás, por los dones del Espíritu Santo.
El significado de estas fotografías saldrá en los días venideros.
“Todos los que permanezcáis firmes saldréis de los días venideros
para recibir vuestras coronas en el Cielo.
Os prometemos que todos que enciendan sus candelas y se conviertan en
almas Nuestras, serán recompensados grandemente en los días que están por
venir.”
Verónica
- A la derecha del asta de la
bandera veo un bello caballo gris y tiene una armadura plateada. Su armadura –
le queda exacta sobre la espalda del caballo.
Y sobre el caballo está sentada una niña, y ella tiene cabello rubio;
creo que tiene aproximadamente diecisiete o dieciocho años. Ella
sostiene una bandera, pero la bandera tiene una gran cruz.
La bandera está hecha en forma de triángulo, y hay una cruz sobre la
bandera. Oh, ella dice – no la
puedo escuchar.
Santa
Juana de Arco -
“¡Avec moi! ¡Avec moi! ¡Conmigo!
¡Conmigo! ¡Oh! Estad
conmigo en la lucha y la batalla que están por venir.
Estamos observando bien. La
victoria final será con aquellos del Cielo.
No tengáis temor, porque Satanás capturará únicamente a quienes se
alejen completamente del Padre. No
pasaréis sobre la tierra sin una prueba. Yo
acepté mi prueba para ganar mi corona en el Cielo.”
Verónica
- ¡Ah!
Del lado izquierdo del asta de la bandera hay una niña joven y ella está
vestida de negro. Y ella sostiene
una cruz en su mano derecha y ella tiene – bueno, ella tiene algo escrito en
su manto, pero parece ser un corazón rojo.
Y ella tiene una pequeña corona de oro en su cabeza.
¡Oh! Gema.
¡Oh, y allí, oh! Por favor
todos arrodíllense. Jesús baja.
Jesús está vestido con una capa roja, parece ser una capa roja.
No, es blanca pero la luz es roja – la hace verse roja.
Oh, y ahora Jesús está de pie al lado de Nuestra Señora.
Nuestra Señora ya no llora. Ella
se ve mucho más feliz que antes. Y
Jesús ha colocado Su brazo alrededor de Su Madre, y Él le dice a Su Madre:
Jesús
– “Otorgo, a través del Padre, el tiempo para la reparación.
No deseo traer sufrimiento a la tierra.
Lo que sucederá será por decisión vuestra y lo que sucederá será
usado para traernos de vuelta a muchas almas.”
Verónica
- Nuestra Señora sostiene un Rosario grande.
El Rosario, las cuentas se ven blancas pero cuando Ella las gira se ven
como si tuviesen distintos colores
en ellas. ¡Son muy bellas! Ella sostiene la cruz en alto.
Oh, Ella señala al extremo de la cruz.
Hay una medalla muy grande. Oh,
oh, ahora lo sé, es la medalla de San Benito.
Nuestra Señora dijo:
Nuestra
Señora - “Debes
dar a conocer este mensaje.”
Verónica
- “Oh, lo siento, no lo sabía. ¿Oh,
lo puedo repetir?
Nuestra Señora dijo que comprende que yo no reconocí el mensaje [la
inscripción en Latín sobre la medalla], pero Ella desea asegurarme que todo
está en el plan del Padre, ya que lo comprenderé en el futuro. ¡Oh!
(Nuestra
Señora extendió Su mano y comenzaron a caer rosas y pétalos de rosas.
Verónica trató de reunirlos)
Ahora Jesús dijo que Le gustaría que todos extendieran los
sacramentales, los Rosarios, las estatuas y todo serán benditos.
Jesús camina hacia el lado izquierdo.
Está por el árbol y está bendiciendo a todos con la señal de la
Trinidad, así. Y Nuestra Señora
está de pie y Ella sostiene algo en Su mano;
parece ser como una bola que tiene una cruz en la parte superior.
Jesús viene al lado derecho del asta de la bandera y va a bendecir a
todos del lado derecho. En el
nombre del Padre, y del Hijo y del Espíritu Santo.
Y Jesús dijo que si tienen sacramentales, tarjetitas santas, fotografías,
los bendecirá para ustedes. Necesitarán
mucha armadura para los días venideros.
Jesús
- “Todos los
mensajes deberán dispersarse con mucha prisa.
No toméis Mis palabras en forma liviana, porque Nosotros no hablamos en
vano. La situación, el equilibrio con el pecado, ha forzado sobre
vosotros un castigo que vendrá pronto. Será
de esta manera que será limpiada la tierra.
Vivid cada día como si fuerais a dejarla.
Estad preparados para lo que se avecina.
“Me preguntáis, hija Mía, muchas veces que por qué permitimos estas
atrocidades. No comprendéis los
caminos de Dios porque sois solamente humanos.
El Padre le dio al hombre un libre albedrío.
El amor no puede forzarse.
“No podéis ver al otro mundo. A
todo vuestro alrededor hay criaturas. Si
llegarais a perder vuestra gracia en defensa, os entrarán.
Y como tal, caeréis bajo el maestro del infierno; y bajo su guía
continuaréis creciendo hasta que hayáis formado una red para destruir a
vuestros hermanos y hermanas.
“Hasta que dejéis vuestra vida terrenal, podréis ser rescatado.
Aquellos que tienen la gracia para su propia salvación ofrecerán
gracias por la salvación de las almas errantes.
Dad, hijos Míos, y se os devolverá duplicado.
“Muchos agentes del infierno, han infiltrado en cada parte de vuestro
país: vuestras escuelas, vuestro
gobierno, vuestros medios de entretenimiento.
A donde podréis ir más sino dentro de vosotros mismos, esperando que no
seáis tentados en la red.”
Nuestra
Señora -
“Encontraréis alimentada esta esperanza si aceptáis la guía de Mi Hijo.
“Satanás ha colocado muchas tentaciones sobre la tierra. Oh, hijos Míos, reconoced la verdad. Están allí para
nutrir vuestras pasiones mundanas, vuestro instinto mundano por consentir
vuestro cuerpo.
“El espíritu es un recinto claro y preciso dentro de vuestro cuerpo
mundano. Los grilletes y cadenas de
vuestro cuerpo caerán al polvo, ¡pero debéis seguir viviendo!
“Vosotros usáis en vuestro mundo la palabra ‘muerte’.
Hijos Míos, no existe la muerte. No
hay muerte. Vuestra vida continuará.
La vida después de ésta será la eternidad y para siempre.
Satanás ha buscado removeros la realidad de la existencia del infierno.
Podéis pecar cuando pensáis que no hay castigo alguno. ¡Reconoced la verdad! Estáis
caminando a ciegas.
“Os prometo que todos quienes vengáis a Mí en Mis terrenos
santificados, os confortaré de vuestros sufrimientos.
Desde Nuestros Corazones serán dadas muchas gracias para la cura y
conversión. No hay nada que el
Padre no haría para rescataros, hijos Míos.
No os alejéis de Nosotros para que vuestros oídos estén cerrados a
Nuestras súplicas. Cerrad vuestros
ojos a vuestro mundo; cerrad
vuestros oídos. Escuchad con
vuestro corazón y recibiréis la luz.
“Encontraréis que el amor está en la unidad. Hijos Míos, unios ahora
en contra del enemigo común de vuestro Dios.
Alejaos de las seducciones de vuestro cuerpo que él ha estipulado.
“Mis cuentas de oración se os dieron.
Os prometo ahora, a todos que recéis Mis cuentas diariamente, seréis
salvados de las pruebas que están por venir.
He pedido que las cuentas vayan por todo vuestros país, eslabón por
eslabón, una cadena sólida para retener la oscuridad.”
Verónica
- ¡Oh! Oh, del lado izquierdo del asta de la bandera hay una niña pequeña, y
ella saluda. Y a la par de ella hay
un niño pequeño, tiene puestas bragas, bragas grises, y una camisa negra con
mangas largas, y alrededor de su cabeza tiene puesta una chalina.
Él sonríe y señala hacia allá y aproximadamente aquí.
¡Oh!
¡Oh! Oh, él señala a la
fotografía. Oh, sí.
¡Oh! Oh, son Jacinta y
Francisco que señalan a la fotografía. Oh,
la niña pequeña - al principio no le entendía.
No comprendo las palabras pero ahora comprendo.
Ella dice:
Jacinta
- “Escribí tu fotografía. Escribí
tu fotografía.”
Verónica
- Y ella dice:
Jacinta
- “Es verdad; sucederá.
Es verdad.”
Verónica
- Y el niño pequeño que está a la par de ella saluda;
saluda con su pañuelo. Nuestra
Señora se ha trasladado a la par de los pequeños niño y niña, y Ella está
al lado de ellos. Y ellos sostienen
dos bellos Rosarios; son Rosarios dorados.
Sé que están hechos de oro porque brillan como oro.
Oh.
Ah, la pequeña niña dijo:
Jacinta
- “Estas salvarán a tu país”.
Verónica
- Nuestra Señora tiene flores
alrededor de Su Rosario y Ella tira los pétalos... (las palabras no está
claras),
Nuestra
Señora - “Tan
numerosos como los pétalos de las rosas, os doy Mis gracias en abundancias.”
Verónica
- Oh, allí está Jesús.
Jesús
– “Os bendigo a todos, hijos Míos. Continuad
con vuestras oraciones.
“Conozco, hija Mía, el valor del sufrimiento.
Cuando vuestra alma entre al Reino deberá brillar tanto como la estrella
más luminosa en el firmamento. Se
os dan muchas gracias a través del sufrimiento,
Hija Mía. Muchas almas
pueden recuperarse si aceptáis con buen espíritu las cruces y las pruebas que
se os mandan. Ofrecedlos en
abundancia por la recuperación de vuestros hermanos y hermanos.
Encontraréis el camino lleno de rosas.
La cruz no dolerá cuando tengáis razón para el sufrimiento.
“Cada momento de vuestra vida restante en la tierra deberá estar en
dedicación. Es únicamente a través
del sufrimiento que vuestra alma estará lista para el Reino.
Qué simple es una prueba cuando sabéis que las glorias del Reino están
por venir.
“Aquellos que están con Nosotros se han ganado sus coronas con el
sufrimiento y al arrojar su libre albedrío y seguir la voluntad del Padre
Eterno.
“Repítete a ti misma frecuentemente, hija Mía, la humilde lección:
Id por vuestra vida, no buscando las aclamaciones y aplausos
del hombre, sino id únicamente al Padre quien os escucha en secreto;
y como tal, seréis recompensados en secreto, pero conocido en una
satisfacción gloriosa al final de vuestra existencia terrenal.”
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Revised: February 03, 2010