Nuestra
Señora de las Rosas, María Auxilio de Madres
6 Septiembre 1975 -
En Honor de la Natividad de la Santísima Virgen María
Verónica - Hay una luz circular, azul pálida, muy grande que
emana del este. Ahora hay una luz
que está siendo arrojada desde la luz circular.
Debo
ver la fotografía. (Pausa).
La
gran luz circular pálida se vuelve materia sólida. Oh, Nuestra Señora está
de pie sobre esto - lo que parece ser una bola.
Es de la única forma que lo puedo describir - un gran globo redondo.-
Ahora Nuestra Señora - oh, Nuestra Señora se ve muy bella.
Ella tiene puesta un muy blanca y brillante... ¿cómo la podría
describir Madre Santísima? La luz
es tan brillante alrededor de Nuestra Señora que Su túnica se ve muy blanca.
Es más blanca que el azúcar y más blanca que la luz. ¡Oh, es bella!
Ahora Nuestra Señora lleva Su dedo índice a Sus labios.
Nuestra Señora - "Hija Mía, no estés demasiado preocupada por
las fotografías que te he dado. Las
estudiarás en privado, hija Mía. Debes
ser más cautelosa en darle al público la información escondida, hija Mía. Debes
comprender que muchas de estas fotografías no son dadas al público.
Es una manera que el Padre Eterno ha escogido dirigirse a ti en secreto.
Ellas podrían, hija Mía, ser dadas a los agentes del 666.
"No debes preocuparte mucho con los otros lugares de apariciones.
A cada vidente se le ha dado su trabajo de parte del Padre Eterno. Todos
debemos unirnos ahora por el bien común.-
Estamos muy acongojados en el Cielo de ver al líder de vuestra tierra
caer presa de satanás. La mujer
realmente será la caída de su esposo.
“Le
hemos pedido al hombre - vuestro líder - que discipline a su esposa, su cónyuge;
sin embargo, en vuestro mundo de mujeres liberadas, es obvio, hijos Míos, que
vuestras mujeres sí usen los pantalones.
“Usaré
una comparación, hijos Míos, ya que muchos han caído por las modas modernas.
"Repetiré la advertencia del Cielo que el hombre no se vestirá
como mujer y las mujeres no adoptarán el atavío de un hombre, porque las
indicaciones externas, hijos Míos, pronto penetran el corazón y exponen una
oscuridad de espíritu. Muchos os
juzgarán por vuestro atavío.
“El
ejemplo entre los padres de familia es malo. Debe haber más disciplina en los
hogares, porque vuestros hijos están siendo mal guiados y enviados sobre el
camino de la destrucción.
“Habrá
muchos portavoces a través del mundo. El
tiempo se acorta. Unidos iréis
hacia adelante. No retraséis
vuestro trabajo dividiendo entre los rangos de los trabajadores.
“El
hombre no reconoce las advertencias del Padre Eterno. Habrá grandes disturbios de la naturaleza.
Habrá inundaciones, terremotos, y gran pérdida de vidas.
Rezad para que esta destrucción no venga cerca de vuestras familias. Muchos niños morirán.
“Hija
Mía, escuchamos voces de discordia que claman al Cielo.
Es la voz del no-creyente. La
fe se ha debilitado en la humanidad. Los
pastores están dispersando a las ovejas. Oh,
¿cuándo despertarán de su sopor - demasiado tarde para salvar a Nuestras
ovejas descarriadas?
“Pedimos
a todos los que han recibido la gracia de lo que ha de ser: ¡enviad este
Mensaje del Cielo a través del mundo con gran rapidez!
"¡Las abominaciones de desolación están centradas a través de la
humanidad en la Casa de Mi Hijo!"
Verónica - Nuestra Señora ahora pone Sus manos encima de Sus
ojos. Ella se ve muy triste.
Nuestra Señora - "Sí, hija Mía, las lágrimas caen del Cielo.
Vemos un complot en contra de Nuestro amado Vicario.
Vemos al enemigo que desde adentro planea removerlo.
Ya, hija Mía, sus manos están atadas.
“Debéis
rezar todos una constante vigilia de oración, hijos Míos, porque, a menos que
seáis dirigidos por la oración al Padre Eterno, vuestras oportunidades de
escapar de la oscuridad son leves.
“El
tiempo de los tiempos está aquí, hijos Míos, el día del regreso se aproxima.
El abismo está abierto. La
lucha por las almas continúa - una batalla mucho más grande que cualquiera que
la humanidad haya visto, o verá, porque estáis aproximándoos rápidamente al
bautismo de fuego. ¿Habéis
preparado vuestras almas y las almas de aquellos a quienes amáis?
Porque la piel se secará y volará de los huesos como si nunca hubiese
existido. Los ojos verán y todavía
no creerán - ¡tan grande es el poder de satanás ahora sobre vuestra tierra!
“El
hombre en su libre albedrío, hijos Míos, se ha entregado a sí mismo a los
placeres de la carne. Ellos ya no buscan la Luz. Ellos se hunden en pecado - toda manera de abominaciones y
destructores de almas. Ellos se
preocupan más por reunir sus tesoros contados en plata y en oro.
¡Y poder! ¿Qué poder,
hijos Míos, estáis ganando entre vosotros?
¡El poder para destruir! Ningún
hombre está por encima del Padre Eterno. Todo hombre se pondrá delante de Él.
El debe dar buena cuenta, en méritos, de su conducta sobre la tierra.
El velo está delante de todos. Todos
deben entrar y ser contados.
“En
vuestro mundo, hijos Míos, las ovejas están siendo separadas de las cabras.
Las fuerzas del mal están luchando contra la Luz.
Vemos mientras los santos claman por venganza.
¡Cuánta sangre será derramada para purificar vuestro mundo! Sangre fluirá por las calles. La locura se apoderará de la
humanidad hasta que ya no haya confianza, ningún amor en los corazones de
aquellos que no se han volteado hacia la Luz y al Padre Eterno.
¡El asesinato será una forma de vida!
¡Cuánto se impondrá el hombre dentro del mal antes que despierte al
hecho que él ha fijado su propia destrucción!
"Muchos han sido bautizados, purificados en la Fe, y ahora han escogido destruir.
"Te envié, hija Mía, a tu ciudad capital para acercarte a dos con
gran poder. No estuvimos
equivocados con la reacción, hija Mía; se
necesitan más oraciones. Escribirás,
y debes dar el conocimiento sin vacilar, ¡que el Cielo espera y exige que hasta
el último en su clan en la humanidad, hable y defienda su fe en tu ciudad de
Washington! Si no lo hace, hija Mía,
será condenado. Él será llevado,
hija Mía, en el momento en que no esté preparado.
“Advertidle
una vez más, hija Mía e hijos Míos, en la misericordia que tenéis por
vuestros hermanos. Hablad sin temor,
hija Mía. Es demasiado tarde,
la hora se aproxima. Ahora
debéis hablar y usar el nombre."
Verónica - ¡Oh!
Nuestra Señora - "Le escribirás a Ted Kennedy y le dirás que él
afronta la condenación eterna.
“Te
pondrás en comunicación con Nuestro representante, quien se ha entregado a sí
mismo al mundo, y le dirás que él también afronta la condenación.
Esto os digo, porque estáis siendo advertidos.
¡Quitaos de esa profesión, Sacerdote!
“¡Padre
Drinan, salid de vuestra oscuridad!
“Sí,
hija Mía, sé de tu temor de hablar, pero ahora lo debes hacer.
Ya te he dado el plan para tu futuro;
por lo tanto, el tiempo está cerca, y debes continuar tu trabajo con
perseverancia y sin temor. Afronta el temor y desaparecerá.
“Comprende,
hija Mía, tu Misión no es juzgar. No
eres más que una portavoz del Cielo y el Mensaje que recibes es del Padre
Eterno. El mundo ahora se aproxima
rápidamente a un terrible clímax; por
lo tanto, debemos trabajar y rezar y hacer mucha penitencia, porque el tiempo se
acorta.
“El
mundo será testigo del sufrimiento mucho más grande que haya experimentado jamás
la humanidad. Será padre contra
hijo, madre contra hija, hermano contra hermana, y hermano contra hermano.
"La locura en masa ha de predominar, tan grande es el poder de satanás,
ya que la humanidad se ha entregado a sí misma al mundo, a la carne y al diablo.
“No
juzgaréis por vuestros eventos actuales, porque los medios de comunicación,
hijos Míos, también se han unido al padre de los mentirosos, satanás.
“Vuestros
hijos buscarán y no encontrarán la Luz a menos que como padres de familia
traigáis disciplina y el conocimiento de vuestro Dios dentro de vuestros
hogares a vuestros hijos. No esperéis
que otros críen, para alimentar las almas de vuestros hijos.
“No
juzgaréis a los pastores en las iglesias del mundo, rezaréis por ellos; sin
embargo, el mal nunca es tolerado. Vuestra
alianza es con el Padre Eterno en el Cielo. No lo ofendáis.
No por un simple hombre ofenderéis al Padre Eterno.
“Vuestra
ciudad y muchas ciudades y naciones en todo el mundo sufrirán por los
asesinatos de los santos inocentes. La
vida, el espíritu de vida, es respirada - el alma es colocada por el Padre
Eterno dentro del cuerpo de los no-nacidos - en el preciso y exacto momento de
la concepción. ¡No caigáis
presas de la falacia que no hay vida hasta que la criatura emerge del vientre!
¡No! Os digo, la vida empieza al
momento de la concepción. El Padre
Eterno le respira el espíritu de vida en el momento de la concepción. Ningún hombre tomará esta vida, ¡porque como tal es
culpable y será encontrado culpable de asesinato por el Padre Eterno!
“Los
Mandamientos dados a través de las épocas por el Padre Eterno, deben ser traídos
hacia adelante y estudiados y obedecidos. Muchos son mal guiados.
No los juzguéis, sino buscad primero su espíritu.
Muchos son mal guiados; ellos
no conocen a su Dios. No podéis
amar si no conocéis. ¿Quién les
dará este conocimiento a los niños inocentes?
“Es
mejor que una feminidad sea colocada bajo la guía de los santos, a que sea
colocada en el mundo de satanás para ser destruida. Debemos, hija Mía, construir un refugio para los jóvenes.
“Mi
Hijo a menudo ha repetido al mundo: 'Cuando Yo venga, ¿encontraré tan siquiera
una pequeña llama de verdad de la Fe? Hijos Míos, sólo unos cuantos serán
salvados en el conteo final. La
Bola de la Redención se aproxima. No contéis en las fechas ni especuléis en
las fechas. Vendrá sobre vosotros
repentinamente."
Verónica - Ahora Nuestra Señora va hacia nuestro lado derecho.
Ella va alto en el cielo y está de pie.
Y, a medida que Ella extiende Su Rosario... Nuestra Señora tiene un
Rosario muy grande. Es bello -
cuentas muy grandes de Avemarías, son
blancas. Pero no, a medida que
atrapan la luz son de los colores más bellos del arco iris.
Pero el rosado - el rosado es el color más bello.
Y ahora los Padrenuestros - Nuestra Señora tiene Sus dedos ahora sobre
la cuenta del Padre Nuestro. Es un
color dorado muy bello.
Ahora
Nuestra Señora extiende Su crucifijo, así, oh, y hace la señal de la cruz: En
el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo.
Nuestra Señora - "Os bendigo a todos, hijos Míos, y pongo Mi
manto de protección a vuestro derredor.
“En
el futuro, que es ahora, hijos Míos, aquellos que estén bien de espíritu no
tendrán nada que temer. Os he dado
muchas palabras en el pasado para prepararos para este momento.
Ahora hijos Míos, continuaréis rezando una constante vigilia de oración,
y comprenderéis por qué he pasado tanto tiempo con vosotros.
“Como os he prometido en el pasado, estaré con vosotros para siempre, y en vuestra tierra hasta la Segunda Venida de Mi Hijo, cuando todo será hecho bueno.
"Debéis
aceptar la voluntad del Padre Eterno y llevad vuestra cruz sin quejaros.
“Hija
Mía, Verónica, aumentarás tus oraciones en silencio. Más momentos de meditación te traerán paz espiritual.
Y te aseguro, hija Mía, el Padre Eterno está consciente de tus
problemas.
“No
comprenderás el valor del sufrimiento. Es
una fuente de gran fortaleza del espíritu. Levanta tu cruz, hija Mía, y ve hacia adelante sin temor.
“No
puedes esperar descanso en esta vida, hija Mía, porque descansarás, si así lo
deseas, más allá del velo.
“Sin
embargo, hija Mía..."
Verónica - ¡Oh! Oh,
Nuestra Señora asciende más, y Ella señala - oh, y allí está Santa Teresita.
¡Oh! ¡Oh! ¡Santa Teresita
es tan bella! La luz es - oh, es brillante.
Oh, sin embargo, puedo ver su rostro.
¡Ah! Su voz es muy suave,
Madre."
Santa Teresita - "Verónica, hermana mía, no escogí descansar
en la tierra, ni después del velo. Rezo
para que vosotros también toméis esta decisión, porque necesitamos todo en la
batalla venidera. No aceptaré un
descanso, porque pasaré mi tiempo en el Cielo bajando a vuestra tierra para
ayudar a reunir almas. Sostened mi mano, mi hermana, y el camino será más fácil.
Juntas podemos caminar sobre pétalos y escapar de muchas espinas.
¿Sabéis, hermana mía, cómo hacer esto? Debéis rezar más y pedir más
sufrimiento. Tengo un secreto para
vosotros - el Padre os dará menos."
Verónica - ¡Oh!
Santa Teresita - "Rezad más y pedid más sufrimiento y el Padre
os dará menos. Ves, el Padre es
muy gentil, Verónica. Aprenderéis
a amarlo como yo lo hice, y como lo hago."
Verónica - Hay un... oh, hay un... Santa Teresita ahora señala
hacia arriba, y hay una bella luz blanca. Y veo a un hombre, un hombre muy
bondadoso. Él tiene - oh, Él tiene cabello muy blanco y una barba pesada, y Él
sonríe. El se ve como, como un
abuelo verdaderamente bueno. ¡Oh!
Él piensa - oh, nuestro Padre sonríe.
Él tiene sobre Su cabeza una corona.
Es una corona bella de terciopelo rojo, pero tiene puntas doradas e
inserciones en todo el alrededor de la parte externa de la corona.
Y Él usa lo que parece ser - se confunde con la silla - una capa de
terciopelo roja, pero esta capa Lo cubre todo, hasta Sus pies. Y El sostiene -
se ve como un cetro en Su mano derecha. Y
El señala ahora hacia abajo, a Su silla. Él
está rebotando una como bola. Va
hacia arriba y hacia abajo y mueve Su mano, así.
Ahora
Nuestra Señora viene hacia aquí, yo - nuestro Padre desaparece en la distancia
y todavía puedo ver la bola que salta. Es
una bola color anaranjado, y salta hacia arriba y hacia abajo.-
Ahora Nuestra Señora señala, tocándose Sus labios.
Nuestra Señora - "Hija Mía, esa es una bola muy tremenda que ves.
Es la Bola de la Redención. Está
al alcance de los dedos del Padre Eterno para hacer como sea Su voluntad.
Reza para que la humanidad se despierte y escape a este gran Castigo,
hija Mía. Se precipitará dentro
de tu atmósfera sin previo aviso. Los
científicos verán con temor como lo hará el hombre común y corriente.
“Sabe,
hija Mía, que ningún científico tendrá una explicación para su aparición.
La Bola de la Redención se acerca, y muchos morirán en la gran llama de
esta Bola de la Redención. Reza
para que puedas detener la oscuridad.
“Ahora,
hija Mía, te sentarás y continuarás con las oraciones de expiación." (Pausa)
“
Hijos Míos, debéis unir vuestras manos en reverencia durante el Sacrificio de
Mi Hijo. Es una expresión de amor,
gratitud, y respeto. Reverencia y
respeto y santidad, deben ser regresados a las Casas de Mi Hijo, Iglesias, a
través del mundo - reverencia, santidad y respeto desde el principio hasta el
fin del sagrado servicio.
“Las
mujeres deben mantener sus cabezas cubiertas, hija Mía.
No es por modas ni boga; es
porque el Padre Eterno y los ángeles exigen el comportamiento apropiado durante
el Santo Sacrificio. Ofende el
Corazón de Mi Hijo muchísimo, ver que satanás ha quitado tanta piedad y
santidad en Sus Iglesias a través del mundo.
"Pedimos y repetimos que nadie toque el Cuerpo de Mi Hijo con las
manos no consagradas. Será
profanado y descartado, a menos que sólo un sacerdote legalmente ordenado, un
hombre de Dios con dedos purificados por el Espíritu Santo, dé el Cuerpo y la
Sangre de Mi Hijo a cada uno bajo su cuidado.
“No
hay necesidad, hija Mía, para que las mujeres se apresuren dentro de los
portales sagrados. Hay suficientes
hombres a través del mundo, hombres consagrados y escogidos como ministros del
Padre Eterno, del Cuerpo y Sangre de Su Hijo, para distribuir entre la humanidad
Su Cuerpo Sagrado. He derramado lágrimas
de gran pesar. ¡Realmente soy la
Madre de los Dolores, a medida que veo esta profanación constante del Cuerpo de
Mi Hijo!
“Mujeres
con vocaciones, os habéis vuelto mundanas.
Habéis escogido de vuestro libre albedrío degradar vuestros cuerpos y
vuestros hábitos. ¿Qué será de
vosotras, doncellas tontas del mundo? Regresad
mientras todavía hay tiempo; purificad vuestros cuerpos a través del
sufrimiento. Colocad sobre vuestros
cuerpos vestimentas de santidad - ¡hasta el suelo! ¡No os pondréis a tentar a
vuestros pastores! Satanás ha puesto un engaño entre vosotras.
Os habéis convertido en doncellas del pecado.
"Hija Mía, todavía hay muchos refugios de pureza a través del
mundo. Dirigirás a aquellos de
corazón puro para que entren. Necesitamos
- debemos tener ejemplos entre los jóvenes.
El Padre Eterno aceptará a muchos en esta vocación gloriosa, con oración."
Verónica - Ahora Nuestra Señora coloca - Ella alcanza hacia
arriba, y hay ahora una corona verde en Su mano. Y Ella extiende Su mano, y veo
a muchos niños pequeños, niñas en vestidos blancos - son largos vestidos
blancos - y usan coronas verdes sobre sus cabezas, y tienen puestos guantes
blancos. Es una procesión muy
larga. Son bellos niños pequeños
- niñas.
Nuestra Señora - "Hija Mía, te doy el conocimiento de muchos de
los santos inocentes que nunca pudieron estar sobre la tierra.
Ellos han sido enviados de vuelta al Padre Eterno sin cumplir con su misión.
¿No observáis el trabajo de satanás?
Las vocaciones caen con la destrucción y el asesinato de las creaciones
del Padre Eterno. En vuestra
arrogancia y naturaleza caída, no les habéis dado la oportunidad de adorar y
hacerle honor al Padre Eterno.
“Sí,
hija Mía, Mi Corazón está apesadumbrado.
Es un día que no puedo aceptar para Mí misma, en Mi natividad, porque
Mi memoria está llena con los incontables asesinatos de los jóvenes.
“El
nacimiento, hijos Míos, debiese ser un día de gran regocijo.
Ahora es una institución profanada.
“Los
líderes de tu nación, hija Mía, se han entregado al mundo.
Sus abominaciones afectan las vidas de muchos.
Sin embargo, la espada está nivelada por Miguel y será enviada a través
de ellos. Ellos, también, deben
arrepentirse y deben hacer un regreso total de sus maneras que ofenden mucho al
Padre, o ellos también, serán arrojados al abismo."
Verónica - Ahora Nuestra Señora va- Ella empieza a flotar hacia - Ella no camina, simplemente
flota. Ella asciende alto, alto en el cielo. Y siento... es como lluvia, una
lluvia muy leve que cae.
Nuestra Señora - "No es un momento feliz, en un cumpleaños, para llorar, hija Mía.
"Reza, hija Mía. No
puedo darte la fecha en público, hija Mía, pero debes rezar mucho y
apresurarte para enviar la advertencia del Cielo."
Verónica - Hay una tremenda letra en el cielo.
Está toda teñida con un color negro.
Parece estar colocada en contra de una luz azul.
Es - puedo ver el contorno - es una enorme "W" para Advertencia
(Warning), y encima de ella veo esta tremenda luz blanca flameante. No, es una -
debe ser una bola encendida. Pero
está tan caliente, está quemando - parece ser un calor blanco quemante.
Ahora
del lado izquierdo - nuestro lado izquierdo - el cielo se pone muy claro, muy
brillante, y hay una formación de un arco iris muy grande.
Digo arco iris, pero no está lleno con una profusión de colores; tiene
un matiz gris brumoso.
Ahora del centro - es casi como hostia en su formación - oh, Jesús
ahora desciende. Lo puedo ver claramente ahora.
Al principio parecía casi como una estatua a la distancia, pero ahora Él
viene hacia adelante. Él tiene
puesta una capa roja; está
amarrada a Su cuello. Y el cabello
de Jesús ondea, por lo que debe hacer viento.
Y ahora, Él extiende Su mano, así, y puedo ver la Llaga en Su mano
derecha. Ahora Él señala hacia el
cielo.
Jesús - "Hija Mía, mucho se te ha dado en conocimiento.
El Padre Eterno ha fijado una medida.
Medida por medida cosechará el mundo el torbellino.
“Vendrá
sobre la humanidad un Castigo de tremenda magnitud, un Castigo que nunca ha sido
visto, ni será visto otra vez por los ojos del hombre.
En la misericordia del Padre Eterno, se os dará una Advertencia, una
advertencia visual, y luego si la humanidad se pone en contra del Padre Eterno,
escogiendo continuar con su vida de pecado, recibirá un justo juicio del Padre
Eterno, y será purificado de sus pecados por un bautismo de fuego.
La Bola de la Redención de la que ha hablado Mi Madre, está en camino.
Medida por medida, vuestros días están contados.
Rezad una constante vigilia de oración.
“No
deseo venir para poner temor en vuestros corazones, así como Mi Madre no ha
venido a poner temor en vuestros corazones, pero os damos el conocimiento de lo
que ha de venir. ¡Vuestro futuro
es ahora! Vivid diariamente vuestra
vida, esperando lo que ha de ser una eventualidad."
Verónica - Ahora Jesús coloca Su mano delante de Él.
Jesús - "Os bendigo a todos, hijos Míos: En el nombre
del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo."
Verónica - Ahora Jesús se mueve hacia allá.
El cielo se aclara. Es - oh,
es bello, el más bello color azul. Oh,
y ahora a medida que Jesús se mueve, hay rayos, rayos rosados que emanan de
todo Su alrededor. Es un círculo
rosado, el más bello color rosado.
Ahora
Jesús está justamente arriba del estandarte, y El tapa algo muy brillante que
está detrás de Él. Parece ser un
objeto enorme que está encendido. Jesús
extiende Su mano, así: En el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu
Santo.
Nuestra
Señora - oh, Nuestra Señora desciende. Ella
viene del lado izquierdo, nuestro lado izquierdo, y ahora Ella flota hacia donde
está Jesús. Y Ella está de pie a
Su lado derecho. Y hace bastante
viento; la túnica de Nuestra Señora
ondea. Puedo ver ahora Su sandalia
derecha. Tiene una bella roseta
dorada en la - en la punta de Su sandalia, Sus zapatos.
Y
Jesús va hacia nuestro lado derecho, justamente por el árbol.
Y El se pasa Su capa al otro brazo.
Es muy, muy - se ve muy pesada y larga. Y ahora Jesús coloca Su capa en
Su brazo izquierdo. Él la reúne, y extiende Su mano, Su mano derecha: En el
nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo.
Jesús - "Continuaréis manteniendo una vigilia. Rezad
una constante vigilia, y comprenderéis. Medida
por medida le dará el Padre a la humanidad.
“Mi
Madre ha venido a vosotros como Mediadora, una Mediadora entre Dios y el hombre.
Sus palabras han ido a través del mundo y continuarán yendo a través
de vuestro mundo en los días de prueba.
“Los
mofadores no creerán; los
corazones endurecidos caminarán en la oscuridad.
Sabed que si pedís Luz... creed, y se os dará el camino.
“Muchos
morirán en la gran llama de la Bola de la Redención. Perseverancia - perseverad en la Fe, hijos Míos, y seréis
salvados."
Verónica - En el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu
Santo.- Ahora Jesús retrocede, El
flota hacia atrás. Y está ahora
de pie al lado de Nuestra Señora. Ellos
ascienden bastante alto en el cielo y ven hacia abajo.
Ahora sus figuras están tan pequeñas que se ven casi como dos
estatuitas de pie allí. Y
veo que Nuestra Señora asiente con Su cabeza.
Nuestra Señora - "Continuad, hijos Míos, con vuestras oraciones
de expiación. No podéis
comprender en este momento cuánto depende de vuestras oraciones y actos de
expiación."
Verónica - En el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu
Santo.
(Verónica
reza el Credo).
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Revised: February 03, 2010
