Nuestra
Señora de las Rosas, María Auxilio de Madres
7
de Diciembre de 1978 - Víspera de la Fiesta de la Inmaculada Concepción
"REZAD
POR VUESTRO VICARIO.
HAY UNA CONSPIRACIÓN EN SU CONTRA. EL NO DEBE ALEJARSE MUY LEJOS DE LA
CIUDAD ETERNA..."
Verónica - ... azul. Lo hace sentir a uno como si hubiera una radiación de un sol oculto. Yo diría que viene del centro del cielo arriba de la estatua de Nuestra Señora. El cielo se abre.
Nuestra Señora viene hacia adelante. Ella se ve muy frágil, muy bella. Nuestra Señora tiene puesta una larga túnica blanca. Sobre Sus pies hay sandalias miniaturas. Ella se ve, oh, asi como una niña joven. ¡Tan bella! Sus sandalias son de un color dorado claro, y en cada pie hay un muy pequeño botón de rosa, un botón dorado de rosa. Se ve casi metálica, la pequeña rosa, y que - a medida que Nuestra Señora se acerca, Ella extiende Sus manos, enfrente de Ella, así. En una mano, Su mano derecha, Ella extiende el Rosario, y en Su mano izquierda, Ella tiene el escapulario color marrón. El manto de Nuestra Señora es blanco, un bello blanco absoluto. El color tiene una pureza que no puedo explicar: más blanco que el azúcar, pero muy, muy brillante.
En
todo el contorno de Nuestra Señora yo veo que salen de la oscuridad, de los
lados del cielo, ángeles quienes cargan guirnaldas.
Las guirnaldas son circulares, y parecen, no como guirnaldas florales,
sino guirnaldas hechas de hojas verdes, casi similar a la corona que Jesús usó
durante Su crucifixión, a pesar que no parece que hubieran espinas grandes en
ellas. Ahora los ángeles flotan; y
ellos no caminan. Como Nuestra Señora,
ellos flotan en el cielo, y ellos están de pie en todo el alrededor de Nuestra
Señora.
Ahora
Nuestra Señora toma el crucifijo de Su bello Rosario, lo extiende, así, y hace
la señal de la cruz: En el nombre
del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo.
Nuestra
Señora ve a Su alrededor. Ella
sonríe. Es una sonrisa triste
sobre Su rostro. Ahora Nuestra Señora
coloca alrededor de Su cabeza, sobre Su cabeza y abajo atravesado sobre Su pecho,
este pedazo grande de tela color marrón, el escapulario.
No tiene figuras el escapulario; es un pedazo sencillo de tela color marrón
sostenido por un cordón color marrón alrededor del cuello de Nuestra Señora.
Solo veo una pieza cuadrada sobre Su pecho.
El otro debe estar detrás de Ella, sobre Sus hombros.
Ahora
Nuestra Señora une Sus manos en oración, con Su cabeza inclinada hacia abajo
en tristeza. Nunca he visto a
Nuestra Señora tan apesarada. Nuestra
Señora - como si Ella hubiera rezado una oración en silencio que no he podido
escuchar por el momento - Nuestra Señora ve hacia arriba ahora y lleva Su dedo
índice a Sus labios.
Nuestra
Señora
- "Hija Mía, Yo quisiera que en este momento repitas para toda la
humanidad la exhortación que te dio Santa Teresita hace algunos años.
Yo pido que toda la humanidad escuche bien y actúe de acuerdo a este
consejo, y que es una de las últimas exhortaciones hechas a la humanidad para
que regrese al redil, o perezca.
"Hija
Mía e hijos Míos, no desechéis este mensaje, ya que es muy urgente.
La guerra, la gran guerra, pronto vendrá sobre vosotros, llevándose a
muchos de la tierra.
“Yo
te he dado, hija Mía, un mensaje para tu Vicario, y él debe actuar de acuerdo
al mismo. Si prosigue siguiendo las
maneras del hombre, empleando el humanismo y el modernismo para la destrucción
de las almas y de la Iglesia de Mi Hijo, no puedo entonces retener más tiempo
la pesada mano del castigo para la humanidad.
“Hijos
Míos, Yo vengo a vosotros como Madre vuestra.
Os imploro que escuchéis ahora. No repitáis vuestros errores, ya que se
os dará un gran Castigo.
“Hija
Mía, no debes volverte emocional ni afectada por la opinión de hombre alguno.
De ninguna manera debes obstaculizar tu Misión.
Hay muchas ovejas que reunir, hija Mía.
Yo no te pediré más de lo que puedes dar al Cielo por la humanidad.
“Hay
muchas portavoces ahora en vuestro mundo, hijos Míos; pero debéis aprender a
reconocer a aquellos quienes son falsos profetas.
Os guiaréis por la palabra escrita del Libro de la Vida, vuestra Biblia.
“Toda
la destrucción que le viene a la humanidad será dada para purificar a vuestro
mundo. Todas y cada uno de las
almas serán evaluadas para su entrada al Reino de vuestro Dios.
"Hija
Mía, la obediencia es una palabra que ha sido distorsionada y utilizada para la
evaluación propia de una persona. Tu
comprenderás, hija Mía, que la obediencia es siempre primero, y lo más
importante, para vuestro Padre Eterno en el
Cielo.
“Cuántas
lágrimas, hija Mía e hijos Míos, He derramado a medida que viajo de aquí
para allá sobre vuestra tierra, advirtiéndoos que os preparéis. Pequeñas advertencias os han sido dadas a través de pequeñas
personas, inocentes de corazón, pequeñas de cosas materiales - sin embargo,
son grandes de corazón a los ojos del Cielo, y sobre estas pequeñas personas
Nosotros escogemos enviarlas adelante. Ellas
entran en una cueva de lobos, muchas para ser sacrificadas en la batalla; sin
embargo, ninguna gloria mayor puede ser dada al hombre que el morir por su Fe.
"Hijos
Míos, debéis todos rezar por vuestro nuevo Vicario.
Sí, el hombre ya no se da cuenta de la existencia de un mundo
sobrenatural. Ahora en todo vuestro derredor las mismas fuerzas del
infierno se concentran para dar batalla. Es
ciertamente la batalla de los dos reinos, hijos Míos: lo bueno y lo malo, El
Padre Eterno en el Cielo contra Lucifer, el caído.
“Hijos
Míos, Yo no puedo advertiros más: ¡debéis
siempre llevar puesto un sacramental! Es
una armadura en contra de las fuerzas sobrenaturales de los demonios, y no debéis
escuchar a aquellos quienes se burlan y destrozan la naturaleza de estos
sacramentales. Rezad por vuestros
sacerdotes. Rezad por vuestros
obispos, vuestros cardenales. Muchos
están destinados a entrar al infierno sin vuestras oraciones.
¿No tenéis la caridad de corazón, hijos Míos, de rezar por vuestros
sacerdotes?
“Oh,
hijos Míos, Mis pastores, escuchadme como Madre vuestra,
Yo os imploro que regreséis. Habéis
sido mal guiados. Una Iglesia en
oscuridad lleva una banda de muerte a su derredor.
Esto, hija Mía, es lo que veis: En la oscuridad, ¿buscarán ellos un
camino? ¿Regresarán ellos?
“Siempre
ha sido del Corazón misericordioso del Padre Eterno que se le haya dado al
hombre las advertencias, aumentando, en crescendo, hasta que vaya a ser dada una
última advertencia antes del gran castigo.
¿Continuaréis sobre la tierra ni reconociendo ni preocupándoos por
vuestra Fe?
"Hijos Míos, os he pedido a todos que volváis vuestros hogares fortalezas en contra del mal. Lucifer ahora tiene control de vuestro mundo. Él tiene control de todos los gobiernos del mundo. Y, tristemente, él está sentado ahora en Roma bajo el nombre de 666, preparando llevar a cabo una revolución en las calles de la Ciudad Eterna.
"Hijos Míos, rezad por vuestro Vicario. Hay un complot en contra de él. El no debe alejarse mucho de la Ciudad Eterna.
“Sí,
hija Mía, Lucifer siempre fue un asesino.
Lucifer fomenta el rompimiento de las leyes y los mandamientos de vuestro
Dios. Por eso es que siempre os
decimos, hijos Míos: Lucifer no puede permanecer escondido, a pesar que fomenta
en vuestro mundo una cubierta de ignorancia y una cubierta de oscuridad.
Y la cubierta que destruirá a muchos está siendo arrojada a un lado, la
realidad de la existencia de los demonios y del mundo del más allá.
“Hija
Mía e hijos Míos, Yo os pido que retengáis en vuestros hogares las oraciones
que le fueron dadas con razón a la humanidad a través de los sacerdotes de Mi
Hijo. Si es necesario las escribiréis,
como en el ABC del aprendizaje de vuestros hijos.
Escribiréis las oraciones y las haréis que vuestros hijos las memoricen,
para retener la Fe en sus corazones. Los
Actos de Fe, Esperanza y Caridad fueron dados por un motivo, y no deben ser
descartados. Hija Mía, Yo te pido
que repitas estas oraciones."
Oh,
mi Dios, yo creo firmemente que tú eres un Dios en tres Personas divinas: el
Padre, el Hijo y el Espíritu Santo. Yo
creo que tu divino Hijo se hizo Hombre y murió por nuestros pecados y que Él
vendrá a juzgar a vivos y a muertos. Yo
creo en el Espíritu Santo, la Santa Iglesia Católica, la comunión de los
santos,
el perdón de los pecados, la Resurrección del cuerpo y la vida eterna.
Amén
Oh,
mi Dios, confiando en tus bondades y promesas infinitas, yo espero obtener el
perdón de mis pecados con la ayuda de tu gracia, y la vida eterna a través de
los méritos de Jesucristo, Mi Señor y Mi Redentor.
Oh,
mi Dios, yo te amo sobre todas las cosas con todo mi corazón y toda mi alma, ya
que eres toda bondad y digno de mi amor. Yo
amo a mi prójimo como a mí mismo por amor a ti.
Yo perdono a todo el que me ha herido, y le pido perdón a todos a
quienes he herido.
"Ves,
hija Mía, cuánto se alivia Mi corazón al escucharte orar así como otros orarán.
La oración será el arma más poderosa en los días venideros.
“Los
libros del Apocalipsis, la Revelación, las páginas pasan rápidamente, hija Mía.
Ahora os acercáis rápidamente al fin."
Verónica
- Nuestra Señora ahora lleva Su mano a Sus ojos.
Ella está llorando muy suavemente...
"Querida Madre, ¿Porqué lloras así?" (Verónica también empieza a llorar).
Nuestra
Señora
- "Hija Mía, tú como Madre comprenderás.
Yo tengo un mundo de hijos, a quienes pierdo todos los días sobre la
tierra. Yo advierto y prevengo, y
no puedo salvarlos a todos. Yo
viajo de aquí para allá, hija Mía e hijos Míos, con la esperanza que, a
medida que Mi voz pasa a través de los portavoces sobre la tierra, Me escucharéis. Aun si recupero a uno de Mis hijos, Mi corazón estará
calmado. Rezad Conmigo; llorad
Conmigo, hijos Míos. Extended
caridad a todos."
Verónica
- Nuestra Señora señala hacia el lado derecho del cielo -
es Su lado izquierdo.
Nuestra
Señora
- "Ves, hija Mía, cuántas veces He venido a tu tierra, y ¿quién ha
escuchado Mis palabras?"
Verónica - Yo puedo ver ahora a Nuestra Señora sentada sobre una piedra. Es como si Ella me estuviera enseñando un portafolio de fotografías. Ella está sentada sobre una piedra.
Nuestra
Señora
- "La Salette, hija Mía. Y,
¿quién escuchó Mis palabras?"
Verónica
- Ahora Nuestra Señora gira. Ella
lleva Su mano hacia afuera, y toda la escena se desaparece del cielo. Ahora se vuelve brillante, y se forma un cuadro en el cielo.
Y Nuestra Señora está de pie allí.
Nuestra
Señora
- "Fátima, hija Mía. Cuántos
buscaron y actuaron de acuerdo a Mi consejo...aún manteniendo la mayor parte de
Mi mensaje escondido. Y ahora ha
pasado, ya que será obispo contra obispo y cardenal contra cardenal.
“Mi
Corazón ha sido destrozado debido al rechazo de muchas de las fotografías
milagrosas que he dado a Mis hijos. Porque
los buenos se han vuelto complacientes y los malos han empeorado.
"Hijos Míos en los Estados Unidos de América, ¿deberéis pasar hambre? Muchas partes de vuestra nación sufrirán carencia de alimentos, porque el invierno será frío. Muchos morirán en el año que viene, hijos Míos. Habrá accidentes que no son accidentes. El hambre estará en los hogares de muchos.
“Hijos
Míos, no os desesperéis, porque parecerá que satanás tiene el control
completo del mundo. Pero sabed que
se le ha dado solo un corto tiempo. Durante
este tiempo, podremos separar las ovejas de las cabras. Es ciertamente una batalla mucho mayor que cualquier batalla
que (jamás) haya sido enviada a la humanidad.
Estos son los días antes de la venida de Nuestro Señor.
“Hijos
Míos, rezad una vigilia constante de oración, Yo os imploro, ya que no sabéis
lo que pronto ha de venir sobre vosotros. Rezad
por vuestros obispos, hija Mía. No
hay lugar para enojo en vuestro corazón, sino siempre debe haber caridad y
oración.
“Si
podéis comprender con caridad, hijos Míos, entonces habréis descubierto el
secreto de las fotografías. Muchos
están ciegos y no verán, porque es una gracia especial el poder leerlas.
Sí, hija Mía, muchos mirarán pero no verán.
Rezaréis, cuando le deis a otro una fotografía, para que el Espíritu
Santo entre en ellos y les abra los ojos, ya que ahora algunos se han vuelto tan
ciegos que nada con la luz puede entrar y perforar su dureza.
“Hija
Mía, como fue en los días de Noé, vosotros tenéis a vuestros mofadores, tenéis
a aquellos quienes perseguirán a los portavoces.
El bueno debe sufrir, ya que las espinas serán largas, y ellos serán
abundantes en los días venideros. Pero
siempre recordad, hijos Míos, debéis pasar a través de estas espinas para
recoger las rosas. Y os digo, como
Madre vuestra, Yo os envío un jardín lleno de rosas en gracias.
“Iréis
adelante en los días que vienen, hija Mía e hijos Míos, con gran
perseverancia. Permaneced libres de
todas las ataduras mundanas o ambientes que son perjudiciales para la Misión y
para vuestras almas.
“Hijos
Míos, Yo comprendo la gran discordia en muchos hogares.
Ya que sabéis que ha sido escrito que habrá discordia, con el padre en
contra del hijo, la madre en contra de la hija, y la caridad se hará fría,
porque el mal se ha acelerado.
“La
mejor armadura ahora serán vuestros sacramentales.
Y, claro está, hijos Míos, Mi Hijo es vuestra defensa. Defended Su Casa, hijos Míos, ya que satanás, Lucifer y su
ejército, buscan ahora destruir la Fe.
“Yo
enviaré, hija Mía, mucha ayuda en tu Misión.
Tu tiempo sobre la tierra se acaba, hija Mía, pero no te preocupes.
Yo he establecido un ejército del Cielo para que te ayude.
Debéis todos llamar a vuestros ángeles.
No los olvidéis. Están
esperando que los llaméis.
“Hija
Mía, le diréis a muchos de vuestros trabajadores que no se asusten, ya que Jesús
planea presentarles muchas manifestaciones para fortalecerlos en la batalla que
se avecina."
Verónica
- Ahora Nuesta Señora toma Su Rosario, el bello crucifijo dorado de Su Rosario,
y hace la señal de la cruz: En el
nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo.
Nuestra
Señora
- "Os bendigo a todos, hijos Míos,
como el Padre os envía Sus gracias sobre vosotros, en el Espíritu de la Luz.
Mi Hijo estará con vosotros prontamente.
“Te
damos tiempo para que revises las fotografías, hija Mía.
La Misión ha llegado a un punto en el cual queda poco tiempo, y las
fuerzas del mal se aceleran, por eso mucho debe permanecer ahora en secreto.
Ciertamente,
hija Mía, es una comunicación privada con el Cielo."
Verónica
- Nuestra Señora ve a Su alrededor. Ella
va hacia nuestro lado izquierdo del cielo y los ángeles La siguen.
Ellos llevan estas guirnaldas. Simplemente
no sé, no comprendo, exactamente porqué tienen unas guirnaldas en sus manos.
Simplemente las sostienen en sus manos delante de ellos, pero siguen a
Nuestra Señora como si se estuvieran preparando para ponérselas a alguien
sobre la cabeza. Hay como -
ni siquiera los puedo contar. Yo
diría que hay más de cincuenta ángeles alrededor de Nuestra Señora.
Simplemente están detrás de Ella, ahora van en un círculo alrededor de
Ella con las guirnaldas en sus manos. Ahora
Nuestra Señora, Ella está de nuestro lado izquierdo, y extiende Su Rosario
hacia adelante, así: En el nombre
del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo.
Nuestra
Señora cruza el cielo. Ella va más lentamente ahora porque ve a Su alrededor.
Ahora Nuestra Señora está justamente a nuestro lado derecho, arriba del
primer árbol. Ella ve hacia abajo
y extiende Su bello crucifijo dorado, y hace la señal de la cruz:
En el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo.
Ahora
Nuestra Señora regresa. Ella va -
Ella flota; Nuestra Señora no camina. Ella
tiene una manera muy bella de flotar como si careciera de peso y es llevada por
el viento. Es tan bello.
Y Nuestra Señora se ve tan, tan joven... nunca puedo explicar cuán
bella se ve Nuestra Señora. Si tan solo... ¡¡Madre Bendita, si tan solo otros pudieran
verte!! Nuestra Señora coloca Su
crucifijo cerca de Su Corazón.
Nuestra
Señora
- "Oh, hija Mía, ¡cuán apesadumbrado está Mi Corazón!
Comprenderás muy pronto, hija Mía."
Verónica
- Ahora Nuestra Señora está de pie allí con Su cabeza inclinada. ¡No creo jamás haberla visto tan triste como ahora!
Nuestra
Señora
- "Reza, hija Mía. Haga
muchos actos de mortificación. Reza
por tu Vicario. Reza que pueda
tener fuerza para resistir la tentación y tener la fuerza para luchar por su
Fe. Recuérdele el camino de
Hyacinth.
“Te
bendigo, hija Mía. Y llama más a
menudo a tus (ángeles) guardianes. Ellos
te fortalecerán."
Verónica
- Nuestra Señora coloca Su Rosario ahora hacia afuera y hace la señal de la
cruz: En el nombre del Padre, y del
Hijo, y del Espíritu Santo.
Nuestra
Señora
- "Ahora, hija Mía, Yo deseo que sean tomadas tres fotografías, pero ni
una sola palabra debes hablar sobre sus contenidos.
Comprenderás ahora el porqué está atravesado Mi Corazón."
(Pausa)
Verónica
- El color es un color muy cálido. No creo que haya visto este color rosado en
tono alguno que el hombre hubiera pintado o dibujado sobre la tierra. Definitivamente
es un color sobrenatural. Es la única
palabra que se me ocurre para describir este color rosado. Yo uso la palabra rosado, pero quizá algún día Nuestra Señora
me dará el nombre correcto para el colorido.
Es simplemente, digamos, un color celestial, un color celestial.
El cielo está radiante con esta bella iluminación rosada que parece
salir en corrientes del centro del cielo. Parece posarse alrededor de los árboles como una niebla, una niebla
rosada.
Pero directamente del centro del cielo, yo puedo ver que Jesús viene hacia adelante. ¡Oh! Él, Él está descalzo; Sus pies están desnudos. Eso es lo primero que noto. Ahora El lleva puesta una larga túnica. Es de color crema, no un blanco absoluto como la túnica de Nuestra Señora. Esta túnica parece ser más de un material como lino. Jesús tiene una banda color marrón. Yo creo que es un pedazo de, una clase de piel de animal. No se ve como tela de lana sino más como un pedazo de banda tipo piel, como diríamos, piel de ternero o algo de esa naturaleza.
Y
la capa de Jesús está muy suelta sobre Sus hombros.
El ahora está de pie con Su mano sobre Su corazón. Yo creo que Él está tan afligido como Nuestra Señora,
debido a este Mensaje que, por ahora, Nuestra Señora me ha dado en secreto,
pero yo espero que el Cielo me permitirá darlo al mundo, quizá para cambiar lo
que ha de suceder. Ahora Jesús
viene hacia adelante, y ve a Su alrededor.
Hace mucho viento, porque Su cabello vuela con el viento. Su cabello se ve - yo creo que es del reflejo del colorido
que sale de Su capa. La capa es de
un color borgoña profundo, y con la luz que brilla, hace que Su cabello se vea
un castaño - rojizo.
Jesús
ve a todo Su alrededor, y extiende Su mano, así, con los tres dedos, y hace la
señal de la cruz: En el nombre del
Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo.
Hay
una quietud muy silenciosa, y yo empiezo a sentir - es la emoción; no lo puedo
explicar en palabreas - como si el tiempo se hubiera detenido, y que Jesús
espera alguna reacción del mundo antes que Él continúe con Su plan - yo diría,
el permiso dado para el mensaje que yo no puedo revelarles por el momento.
Ahora Jesús toca Sus labios con Su dedo índice.
Jesús
- "Hija Mía e hijos Míos, Yo no tengo que repetiros el consejo de Mi
Madre. A través de incontables años
terrenales, Mi Madre ha tratado de dirigiros lejos de vuestras propias maneras
destructivas para poder prevenir que un mayor desastre caiga sobre la humanidad.
El Padre Eterno ha considerado necesario en ciertos momentos, castigar a
aquellos a quienes El ama. Oh,
hijos Míos, nunca aprendéis del pasado. Repetís
los mismos errores, una y otra vez, y como niños errantes, debéis ser
castigados.
“Yo
les He dado una advertencia justa a los pastores en Mi Casa para que restauren
Mi Casa a Su gloria anterior. Aflige
a todo el Cielo el ver la pérdida de Nuestras Ovejas y de las ovejas que ahora
están descarriadas sin dirección. Sépase
a toda la humanidad que el pecado se ha vuelto una forma de vida entre vosotros,
y el pecado ha oscurecido vuestro espíritu hasta que tengáis que ser
purificados.
“Vuestro
mundo no perecerá en su totalidad como en el pasado.
El Padre Eterno promete que habrá una purificación gradual sobre la
tierra hasta el establecimiento del Reino.
“Hijos
Míos, Mi Madre - Su corazón está destrozado a medida que Ella lucha durante
el poco tiempo que queda para reunir a Sus hijos sobre la tierra.
Lucifer, el adversario, tiene ahora a todos sus ejércitos concentrados,
ya que él sabe que su tiempo se hace más corto.
Debéis leer y releer el consejo de Mi Madre que se os ha sido dado en el
pasado. Como un acertijo, muchos de vosotros buscáis la respuesta.
Todo caerá en su lugar con el tiempo.
"En el Libro de la Vida, vuestra Biblia, las páginas se pasan rápidamente. Los días del Apocalipsis están sobre vosotros. Muchos tendrán visiones. Y vendrá un tiempo cuando una bola en llamas os atravesará, y una cola de fuego devorará todo a su paso. Todos aquellos quienes ríen, vosotros mofadores sobre la tierra, despertaréis de vuestra ceguera demasiado tarde.
“Ahora,
hijos Míos, parece ser, que Mis pastores se han vuelto ciegos, y los ciegos
enseñan el camino a los ciegos. ¿Habrá
siquiera una pequeña llama de Fe cuando Yo retorne a la tierra?
El número de los que serán salvados puede contarse ahora entre pocos,
hijos Míos. Cada hombre, mujer y
niño de edad de conciencia serán probados, y muchos serán encontrados
careciendo y no podrán ser salvados.
“Hijos
Míos, debéis reunir a vuestros hermanos y hermanas para retener la Fe a pesar
que se volverá tan solo una pequeña llama en la oscuridad.
Mejor que haya pocos con calidad que cantidad y nada.
“Hijos
Míos, Mi Madre Se ha tomado sobre Sí el papel de actuar como Mediadora entre
Dios el Padre y el hombre. Su Corazón
es destrozado constantemente por el rechazo que Ella recibe de la humanidad,
porque los buenos se han vuelto complacientes, y los malos han empeorado.
Y entre (los buenos y los malos), Nosotros encontramos aquellos a quienes
`no les podría importar menos', porque ellos no son ni calientes ni cálidos,
sino tibios. Y aún los tibios serán
arrojados a un lado en la cuenta final.
“Hijos
Míos, en vuestro bautismo sobre la tierra, habéis recibido el camino, habéis
recibido las llaves del Reino. Pero
no reconocéis vuestra herencia inestimable, y la desecháis a un lado por unos
cortos años sobre la tierra, reuniendo los tesoros y el poder de la tierra para
vosotros mismo. ¿Y para qué?
Nada más que los méritos que habéis almacenado para pagar el rescate
de vuestra alma del Purgatorio, nada más que los méritos que habéis reunido
para permitiros entrar al Reino Eterno de felicidad y luz.
"Muchos ahora venden sus almas sobre la tierra para poder llegar a la cima. Como los treinta pedazos de plata, Yo escucho el tintinear de las monedas que son aventadas para vender Mi Iglesia. Recordaos, Oh pastores, el día vendrá cuando estaréis de pie delante de Mi en juicio, ¿y diréis que vuestras enseñanzas han sido puras delante de Mi vista? Yo os diré: ¡Retiraos de Mi, vosotros víboras! a medida que Yo os arrojo a las llamas.
“Nuestros Corazones están destrozados porque muchos han sido mal guiados. Nosotros pedimos que muchos acepten una gran carga: una carga de perseverancia. Y ésta es una carga cuando la oposición es grande, una carga llena de gracias eventuales para aceptar el martirio sobre la tierra.
“Hijos
Míos, muchas gracias serán dadas, y para aquellos quienes reciban estas
gracias, mucho es esperado de ellos. Es
un camino estrecho hacia el Cielo. Muchos
empiezan pero no perseveran.
“Hijos
Míos, perseverad en la Luz. Retened
la Fe en los corazones de vuestros hijos, porque pronto habrá muchas lágrimas
que caerán, crujir de dientes y aflicciones sobre la tierra.
Y cuán grande el consuelo que tendréis si habéis retenido la Luz en
vuestros corazones y en los corazones de vuestros hijos cuando estas horas de
oscuridad se aproximen y haya gran miseria, y angustia sobre la tierra.
“Todos
rezaréis una vigilia constante de oración, una vigilia constante de oración
a través de vuestra nación y de todas las naciones de la tierra. Estáis acercándoos al tiempo del gran cataclismo.
El miedo entrará en los corazones de muchos y causará que
mueran. Pero, hijos Míos de la
Luz, recordad: el miedo puede ser una herramienta del diablo; así que debéis
comprender: todos aquellos quienes son de buen espíritu no tendrán nada que
temer. El Padre Eterno es la
dirección. El os guiará, hijos Míos,
a través de mares turbulentos. Confiad
y esperad en el Padre Eterno.
“Hijos
Míos, Yo no tengo la intención de continuar con una disertación larga con
vosotros sobre lo que ha de suceder sobre la tierra.
Yo estoy seguro que Mi Madre os lo ha hecho saber, en cuanto a los días
venideros. Ningún hombre puede
comprender los caminos del Padre Eterno. Su
misericordia ha sido forzada hasta el punto de reventar ahora, hijos Míos.
Nosotros pedidos muchas almas víctimas para que se entreguen por la
repatriación de las almas de aquellos quienes, de otra manera, se perderían
para siempre del Cielo.
“Hijos
Míos, proteged bien vuestras casas, y no lloraréis por vuestros hijos.
Pero debéis vigilar que el enemigo no entre en vuestro hogar, aún
disfrazado como un ángel de luz. Ahora
será la total responsabilidad de los padres de familia que retengan la Fe en
los corazones de sus hijos.
“Lucifer,
el 666, ahora lleva a cabo una completa batalla en contra de Mis hijos sobre la
tierra. La batalla es permitida.
Es el día del que se ha escrito y se ha hablado en el pasado.
El día está sobre vosotros, y el tiempo del Armagedón está a la mano.
“Hijos
Míos, rezad constantemente. Las
oraciones no tienen que venir de un libro, sino rezaréis con vuestros corazones.
Levantad vuestros corazones en creencia.
Creed y se os dará el camino. Yo
os bendigo a todos, hijos Míos, y os envío la gracia de la perseverancia en la
adversidad y la persecución. Hijos
Míos, rezad constantemente. Yo no
puedo aconsejaros lo suficiente, ya que la oración es una de las más grandes
partes de vuestra armadura."
Verónica
-
Ahora Jesús extiende Su mano, así, y hace la señal de la cruz: En el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo.
Jesús señala hacia el lado derecho del cielo, y allí se forma en el
cielo una gran bola redonda. Está
toda envuelta en negro. No lo puedo
explicar. La bola parece muy
siniestra; y sobre la bola se está formando una cruz gigante.
Ahora
toda la escena - no lo puedo explicar 1 empieza a flotar completamente a través
del cielo hacia el lado derecho. La
bola 1 es una bola muy grande - yo creo que simboliza el mundo.
Y hay una gran cruz sobre ella, una cruz que se ve muy negra.
Y flota ahora a través del cielo, y se dirige hacia nuestro lado derecho. Parece que va a hacer un círculo completo en el cielo.
Yo puedo escuchar ahora que Jesús habla desde lejos.
Jesús
- "El mundo sentirá la ira de un Dios enojado, hija Mía.
El pecado es muerte."
Verónica
- Yo todavía puedo ver la bola que va a través del cielo.
Es, está esbozada en negro, y sobre ella hay una cruz oscura muy negra.
Yo nunca había visto una figura así en el firmamento.
Ahora parece que le ha dado la vuelta a todo el cielo alrededor de
nosotros. Y empieza a - está
directamente arriba del árbol del lado izquierdo, y empieza ahora a
desvanecerse. Como si se
estuviera evaporando.
Ahora hay una oscuridad muy profunda que se cierra sobre el cielo del lado izquierdo. Jesús viene hacia adelante. El debe haber ido completamente hacia el lado derecho del terreno, y se detiene. Él está justamente arriba de la estatua ahora, y se detiene y coloca Su mano hacia adelante, así, y hace la señal de la cruz: En el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo.
Jesús
- "Continuad ahora, hija Mía e hijos Míos, con vuestras oraciones de
expiación. Son dolorosamente
necesitadas." (Pausa)
Verónica
- El mundo debe reconocer la importancia de la fotografía de `Jacinta 1972'.
Nuestra Señora pidió que todos la leyeran y la examinaran bien.
Es uno de los regalos más grandes que se ha dado a la humanidad en estos
últimos días, una manifestación del Cielo.
Todos aquellos quienes están en la Luz, reconocerán e interpretarán la
fotografía `Jacinta 1972', y ellos no serán tomados desprevenidos.
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Revised: February 03, 2010
